Bangkok, 16 sep. – Las devastadoras inundaciones en Birmania (Myanmar) han cobrado la vida de al menos 113 personas, mientras que 64 permanecen desaparecidas y más de 320.000 han sido desplazadas, según los últimos informes oficiales divulgados este lunes por la prensa controlada por la junta militar.
El portavoz de la junta, Zaw Min Tun, indicó que las lluvias torrenciales, provocadas por la depresión tropical Yagi, han causado estragos desde el comienzo de la semana pasada, inundando más de 72.900 viviendas. Las crecidas de los ríos y las fuertes precipitaciones han afectado principalmente las regiones de Naipyidó, la capital, Mandalay, Shan, Bago, Kayah, Kayin y Mon, en el centro y sureste del país, según el diario estatal The Global New Light of Myanmar.
Destrucción masiva en las aldeas afectadas
En Mandalay, U Soe, un residente de 50 años, relató el devastador impacto en las aldeas de Tha Sae Ping y Chaok Phi, donde las inundaciones han destruido viviendas y anegado carreteras y plantaciones. “Muchas casas han sido arrasadas por el agua, y las carreteras están completamente sumergidas”, afirmó Soe en una entrevista telefónica con EFE.
En Leway, una localidad cercana a Naipyidó, U Aung describió que el nivel del agua ha comenzado a descender, pero que muchas personas, incluyéndose él, no han podido regresar a sus hogares. Actualmente, unas 1.200 personas se refugian en centros de acogida. “El agua alcanzó hasta la segunda planta de algunas casas, y las viviendas de una sola planta quedaron completamente sumergidas, con niveles que llegaron hasta tres metros de altura”, comentó Aung.
Dificultades en la distribución de ayuda
A medida que las aguas han comenzado a bajar en algunas zonas, la distribución de ayuda se ha complicado. U Aung señaló que, aunque inicialmente recibieron suministros de alimentos y agua, la asistencia se ha redirigido hacia las áreas más gravemente afectadas.
El recuento exacto de víctimas y personas desplazadas es difícil de precisar, ya que las autoridades publican cifras de manera irregular, y algunas zonas son de difícil acceso debido al terreno y la situación política del país, sumido en un conflicto armado.
Llamado internacional de ayuda
Ante la magnitud del desastre, la junta militar lanzó un inusual llamado internacional solicitando ayuda humanitaria, ofreciendo cuentas bancarias para donaciones dentro y fuera del país a través de su medio oficial, The Global New Light of Myanmar.
Birmania, aislada en gran parte del escenario internacional tras el golpe de Estado militar de 2021, enfrenta una profunda crisis humanitaria que se ha exacerbado con el paso de Yagi y las intensas lluvias monzónicas. La situación se ve agravada por el conflicto armado que afecta a gran parte del país, principalmente en sus áreas periféricas, complicando aún más los esfuerzos de ayuda y recuperación.
El temporal también ha causado daños significativos en otros países del sudeste asiático, como Vietnam, Laos, Tailandia y Filipinas, todos afectados por el paso del tifón Yagi y sus secuelas.