WASHINGTON/EL SALVADOR, 13 de abril — Estados Unidos deportó este domingo a otros **10 migrantes acusados de pertenecer a las pandillas salvadoreña *Mara Salvatrucha (MS-13)* y venezolana Tren de Aragua, como parte de un esfuerzo coordinado con el gobierno de Nayib Bukele para combatir el crimen organizado. El anuncio fue realizado por el secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, quien destacó la colaboración entre ambos países como un modelo de seguridad regional.

“Anoche llegaron a El Salvador otros 10 delincuentes de las organizaciones terroristas extranjeras MS-13 y Tren de Aragua”, escribió Rubio en sus redes sociales. “La alianza entre el presidente Trump y el presidente Bukele se ha convertido en un ejemplo para la seguridad y prosperidad de nuestro hemisferio”, agregó.

Este movimiento ocurre a pocas horas de la reunión programada entre los presidentes Donald Trump y Nayib Bukele en Washington, donde discutirán temas clave como seguridad, migración y cooperación internacional contra el crimen organizado.


Declaraciones de Trump sobre los Deportados

El presidente estadounidense, Donald Trump, también se pronunció sobre el tema, señalando que el futuro de los deportados ahora depende del gobierno salvadoreño.

“El presidente Bukele ha aceptado con generosidad bajo la custodia de su nación a algunos de los enemigos extranjeros más violentos del mundo, y en particular de Estados Unidos. Estos bárbaros están ahora bajo la custodia exclusiva de El Salvador (…) y su futuro depende del presidente y su gobierno. ¡Nunca más amenazarán a nuestros ciudadanos!”, declaró Trump.

La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, confirmó que durante la reunión de este lunes, Trump y Bukele abordarán la colaboración de El Salvador en materia migratoria, así como la estrategia conjunta para desmantelar redes criminales transnacionales.


El Papel del CECOT en la Estrategia de Seguridad

Los deportados fueron enviados directamente al Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), una prisión de máxima seguridad ubicada a 75 kilómetros al sureste de San Salvador. Este centro penitenciario, diseñado específicamente para albergar a pandilleros y otros delincuentes de alta peligrosidad, ha sido fundamental en la estrategia de Bukele para combatir el crimen organizado.

Desde su apertura, el CECOT ha recibido a cientos de miembros de pandillas detenidos en el marco del estado de excepción implementado por el gobierno salvadoreño hace casi tres años. Según Bukele, los detenidos permanecerán recluidos durante un período inicial de un año, aunque esta medida podría ser renovada dependiendo de las evaluaciones de seguridad.


Operativo Coordinado: Más de 250 Criminales Trasladados

El traslado de estos 10 individuos forma parte de una operación más amplia anunciada el pasado 15 de marzo, cuando más de 250 integrantes de las pandillas Tren de Aragua y MS-13 fueron deportados desde Estados Unidos hacia El Salvador. Entre ellos se incluyen 238 miembros del Tren de Aragua y 23 de la MS-13, incluyendo dos líderes considerados altamente peligrosos.

El presidente Bukele destacó que esta operación permitirá avanzar en la recopilación de inteligencia y en la persecución de los remanentes de estas organizaciones criminales. “Esto nos ayudará a concluir la recopilación de inteligencia y a perseguir a los últimos remanentes de la MS-13, incluidos sus antiguos y nuevos miembros, dinero, armas, drogas, escondites, colaboradores y patrocinadores”, afirmó.


El Tren de Aragua y la MS-13: Amenazas Transnacionales

El Tren de Aragua, originario de Venezuela, es una de las bandas más temidas de América Latina, conocida por su involucramiento en actividades ilícitas como el tráfico de drogas, la extorsión y el secuestro. Por su parte, la Mara Salvatrucha (MS-13), con raíces en Centroamérica y Estados Unidos, es reconocida por su estructura violenta y su capacidad para operar a nivel transnacional.

Ambas organizaciones han demostrado su habilidad para expandir su influencia más allá de las fronteras nacionales, lo que ha obligado a los gobiernos de la región a buscar soluciones conjuntas para contener su impacto en las comunidades.


Desafíos para el Sistema Penitenciario Salvadoreño

Aunque el traslado de estos criminales representa un paso significativo en la lucha contra el crimen organizado, también plantea desafíos para el sistema penitenciario salvadoreño, que ya enfrenta problemas de hacinamiento y recursos limitados. Sin embargo, el gobierno de Bukele ha reiterado su compromiso de mantener el control absoluto sobre las cárceles y garantizar que los detenidos no puedan continuar operando desde el interior de las prisiones.

El CECOT, con tecnología avanzada y medidas de seguridad extremas, está diseñado precisamente para evitar fugas y neutralizar cualquier intento de organización criminal dentro de sus instalaciones.


Conclusión: Un Esfuerzo Internacional Contra el Crimen Organizado

El traslado de más de 250 miembros de las pandillas Tren de Aragua y MS-13 a El Salvador refuerza los esfuerzos internacionales para combatir el crimen organizado y proteger a las comunidades de su influencia. Con el apoyo de Estados Unidos, el gobierno salvadoreño busca consolidar su estrategia de seguridad y enviar un mensaje claro de que no habrá tolerancia para quienes amenacen la paz y la estabilidad de la región.

¿Qué implicaciones tendrá esta cooperación para la seguridad regional? Aunque los esfuerzos conjuntos demuestran avances significativos, la clave estará en la capacidad de los gobiernos para mantener esta presión a largo plazo y abordar las causas estructurales que alimentan el crimen organizado.

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