BOSTON, 20 feb.- La rivalidad deportiva entre Canadá y Estados Unidos alcanzará su punto máximo esta noche en el TD Garden de Boston, donde ambos países se enfrentarán en la final del Four Nations Face-Off, un torneo que ha trascendido el ámbito deportivo para convertirse en un símbolo de las crecientes tensiones políticas entre las dos naciones.

Lo que inicialmente parecía ser una exhibición de hockey sobre hielo antes del regreso de la NHL a los Juegos Olímpicos en 2026 se ha transformado en un evento cargado de simbolismo político, impulsado por las declaraciones y acciones del presidente estadounidense, Donald Trump, quien ha avivado el resentimiento en Canadá con sus propuestas polémicas.


Trump y la Propuesta del “Estado 51”

El presidente Trump ha generado controversia al sugerir repetidamente que Canadá debería convertirse en el estado número 51 de Estados Unidos, además de amenazar con imponer aranceles generalizados a los productos canadienses. En una publicación en Truth Social el jueves por la mañana, Trump reiteró su propuesta mientras deseaba buena suerte al equipo de hockey de Estados Unidos: “Llamaré a nuestro gran equipo de hockey estadounidense esta mañana para alentarlos hacia la victoria esta noche contra Canadá”, escribió.

Aunque Trump no estará presente en el juego debido a una reunión con gobernadores en Washington, aprovechó la oportunidad para extender una invitación al primer ministro canadiense, Justin Trudeau: “Todos estaremos observando, y si el gobernador Trudeau quiere unirse a nosotros, será bienvenido”, dijo.

Trump cumplió su promesa y habló durante cinco minutos con los jugadores estadounidenses a través del teléfono del gerente general del equipo, Bill Guerin. Según los jugadores, la llamada fue motivadora y breve, centrada en disfrutar el orgullo de representar a su país. “Fue genial escuchar el apoyo”, comentó el delantero JT Miller, mientras que el defensa Brock Faber destacó que el mensaje de Trump fue simple: “Simplemente diviértete, disfrútalo”.

Sin embargo, según el defensor Zach Werenski, Trump no mencionó la idea del “estado 51” durante la conversación, aunque compartió algunas historias de golf.


Reacciones en Canadá: Abucheos y Rivalidad Intensificada

En Canadá, las declaraciones de Trump han generado indignación y han alimentado una rivalidad deportiva ya intensa. Los aficionados canadienses han respondido abucheando el himno estadounidense en varios eventos deportivos, incluida la victoria de Estados Unidos por 3-1 sobre Canadá el sábado en Montreal durante la fase de grupos del torneo. Ese partido, marcado por tres peleas en los primeros nueve segundos, dejó claro que la rivalidad va más allá del deporte.

Esta noche, en Boston, se espera que la respuesta de los fanáticos canadienses sea aún más contundente. El ambiente estará cargado de emoción y tensión, especialmente después de que el equipo canadiense asegurara su lugar en la final con una victoria por 5-3 sobre Finlandia el lunes.


El Papel de la NHL y el Regreso a los Juegos Olímpicos

El Four Nations Face-Off es el primer torneo internacional que cuenta con las mayores estrellas de la NHL desde el Mundial de 2016 en Toronto. Este evento marca un paso importante hacia el regreso de los jugadores de la NHL a los Juegos Olímpicos, programados para Milán y Cortina 2026 en Italia. La última vez que los jugadores de la NHL participaron en unos Juegos Olímpicos fue en Sochi 2014, cuando Canadá derrotó a Suecia por 3-0 en la final.

Para muchos jugadores, este torneo representa una oportunidad única de representar a sus países y prepararse para futuros desafíos internacionales. Sin embargo, la presión política añade un nivel adicional de intensidad al enfrentamiento.


Un Partido Cargado de Símbolos

El gerente general de Estados Unidos, Bill Guerin, ha sido uno de los principales impulsores del ambiente tenso al sugerir que Trump debería asistir al juego. “Tenemos una sala llena de jugadores, entrenadores y personal estadounidense orgullosos. Escuchen, simplemente estamos tratando de representar a nuestro país de la mejor manera posible”, declaró Guerin, señalando que los jugadores están usando la tensión política como “inspiración”.

Por su parte, los canadienses llegan a la final con la determinación de defender su orgullo nacional frente a lo que perciben como provocaciones externas. El equipo ha demostrado su capacidad para superar adversidades, como su victoria sobre Finlandia, y buscará imponerse en un escenario donde el deporte y la política convergen.


Más Que un Partido de Hockey

La final del Four Nations Face-Off no es solo un enfrentamiento deportivo entre dos potencias del hockey sobre hielo, sino también un reflejo de las tensiones políticas y sociales entre Canadá y Estados Unidos. Mientras los jugadores compiten por la victoria, los aficionados y líderes políticos observan atentamente, convirtiendo este partido en un evento histórico que trasciende el ámbito deportivo.

Independientemente del resultado, esta noche quedará grabada en la memoria colectiva como un ejemplo de cómo el deporte puede convertirse en un campo de batalla simbólico para resolver disputas más amplias.

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