Dubái, Emiratos Árabes Unidos, 14 dic. – Un tribunal revolucionario de Irán sentenció al periodista iraní-estadounidense Reza Valizadeh a 10 años de prisión tras declararlo culpable de “colaborar con un gobierno hostil”, en referencia a Estados Unidos, informó su abogado, Mohammad Hossein Aghasi.

Valizadeh trabajó para el servicio en farsi de Voice of America (VOA), financiado por el gobierno de Estados Unidos, y para Radio Farda, emisora vinculada a Radio Free Europe/Radio Liberty. Ambas plataformas son consideradas hostiles por la teocracia iraní.

Detalles del caso

El abogado de Valizadeh indicó que el veredicto se emitió hace una semana y que aún puede ser apelado en un plazo de 20 días. Sin embargo, Aghasi no ha podido reunirse con su cliente desde que se dictó la sentencia.

En marzo de 2024, Valizadeh anunció su regreso a Irán después de 13 años en el extranjero, según un mensaje publicado en sus redes sociales. En él afirmó haber tenido contactos previos con el departamento de inteligencia de la Guardia Revolucionaria, pero subrayó que no había recibido ninguna garantía de seguridad para su retorno.

El periodista permaneció en libertad durante los primeros seis meses tras su llegada, hasta que fue arrestado por las autoridades iraníes.

Contexto de la persecución a periodistas

La condena a Valizadeh es el episodio más reciente en una serie de represalias contra periodistas y trabajadores de medios considerados críticos por el régimen iraní.

En noviembre, Kianoosh Sanjari, un exreportero de VOA, se suicidó en Teherán como acto de protesta contra el líder supremo Ali Jamenei y la represión sistemática contra la disidencia. Además, en 2007, Parnaz Azima, exlocutora de Radio Farda, fue detenida temporalmente y enfrentó interrogatorios constantes cuando regresó a Irán por motivos familiares.

Un país en tensión

Irán sigue lidiando con tensiones internas y externas. Las protestas desatadas por la muerte de Mahsa Amini en 2022 y la crisis económica agravada por la devaluación del rial frente al dólar estadounidense han sumido al país en un clima de inestabilidad social y política.

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