Tokio, 9 de agosto de 2024 – Un terremoto de magnitud 5,3 sacudió este viernes el este de Japón, afectando principalmente la prefectura de Kanagawa, al sur de Tokio. El seísmo ocurrió a las 19:57 hora local (10:57 GMT) con un epicentro a 10 kilómetros de profundidad, según informó la Agencia Meteorológica de Japón (JMA). A pesar de la intensidad del temblor, las autoridades no emitieron ninguna alerta de tsunami.
El terremoto fue notable en la capital y sus alrededores, alcanzando el nivel 5 inferior en la escala sísmica japonesa, que mide la agitación en la superficie y su potencial destructivo. Este temblor se produce apenas un día después de que un fuerte seísmo de magnitud 7,1 sacudiera la prefectura de Miyazaki, en la isla de Kyushu, en el sudoeste del país, generando un pequeño tsunami y dejando una quincena de heridos y daños materiales significativos.
El seísmo del jueves también provocó que la JMA emitiera una alerta especial por el incremento del riesgo de un gran terremoto en la fosa de Nankai, una de las zonas de mayor actividad sísmica en el mundo. Este riesgo ha llevado al gobierno japonés a coordinarse estrechamente con las autoridades locales y a preparar un sistema de prevención ante la posible ocurrencia de un seísmo de gran magnitud.
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, declaró tras el temblor de este viernes que, aunque no se han reportado heridos ni daños significativos, el gobierno ha establecido un equipo especial para recopilar información y evaluar la situación. Se registraron cortes energéticos en algunas áreas, y la línea Odakyu, así como los trenes de alta velocidad ‘shinkansen’ entre Shinagawa y Shizuoka, fueron temporalmente suspendidos.
Japón, ubicado en el Anillo de Fuego del Pacífico, sufre terremotos con relativa frecuencia, y sus infraestructuras están diseñadas para soportar este tipo de eventos naturales. La preparación y respuesta ante emergencias sísmicas sigue siendo una prioridad en el país, dada su ubicación geográfica en una de las regiones más activas del planeta.