Caracas, 24 julio.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró este martes que su advertencia sobre un posible “baño de sangre” en la nación caribeña si pierde las elecciones presidenciales del 28 de julio fue una “reflexión”. Además, agregó que quienes se asustaron por esta declaración deberían “tomarse una manzanilla”.
“Yo no dije mentiras, solo hice una reflexión. El que se asustó que se tome una manzanilla porque este pueblo de Venezuela está curado de espanto y sabe lo que estoy diciendo. En Venezuela va a triunfar la paz, el poder popular, la unión cívico-militar-policial perfecta. Aquí no viene (Javier) Milei”, declaró el mandatario en un acto de campaña transmitido por el canal estatal VTV.
Maduro respondía así, aunque sin mencionarlo directamente, a las declaraciones de su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva. Lula expresó haberse asustado cuando Maduro dijo que si pierde las elecciones habrá “un baño de sangre”, lo que la oposición interpretó como un intento de provocar la abstención entre quienes desean sacarlo del poder. “Me asusté con esa declaración”, dijo Lula en una entrevista con corresponsales extranjeros, revelando que conversó dos veces con Maduro para advertirle que “si quiere contribuir a resolver el problema de crecimiento de Venezuela y la vuelta de los que se fueron, tiene que respetar el proceso democrático”.
Lula, quien en los últimos meses ha mostrado sus diferencias con Maduro, añadió que, en democracia, “el que pierde se lleva un baño de votos, no un baño de sangre”. Además, señaló que “Maduro tiene que aprender que cuando uno gana se queda, y cuando pierde se va y se prepara para otras elecciones”.
El presidente Maduro, que insiste en que continuará al frente del poder, afirmó que ha “salvado” a Venezuela de una “guerra civil” en varias ocasiones, sin especificar los momentos y circunstancias.
“Yo dije que si, negado y trasmutado, la derecha extremista, bolsonarista, seguidores de Milei y de Hitler, llegaran al poder político en Venezuela, vendría un baño de sangre, y no es que lo digo inventando, es que ya vivimos un baño de sangre, el 27 y 28 de febrero (de 1989, en referencia al conocido ‘Caracazo’)”, explicó.
Brasil enviará a Venezuela dos observadores de la Justicia electoral para los comicios presidenciales, así como el excanciller y actual asesor de Asuntos Internacionales, Celso Amorim.