MADRID, 28 de abril.- La España peninsular y Portugal han sufrido este lunes un apagón eléctrico masivo e inédito que comenzó a las 12:30 horas, provocando caos en los sistemas de transporte, telecomunicaciones y otros servicios esenciales. Aunque el suministro eléctrico se ha ido recuperando gradualmente, hacia las 16:30 horas se había restablecido aproximadamente el 50 % de la demanda prevista, según informes de Red Eléctrica de España (REE).
Causas del Apagón: Oscilación Extrema en el Flujo de Potencia
El operador del sistema eléctrico español, Red Eléctrica, ha calificado el incidente como “absolutamente excepcional”, atribuyéndolo a una oscilación muy fuerte en el flujo de potencia de las redes eléctricas, cuyo origen aún no ha sido determinado. Esta oscilación provocó la desconexión del sistema eléctrico español del resto de la red europea, lo que generó un colapso generalizado en la Península Ibérica.
Según Eduardo Prieto, director de Servicios a la Operación de REE, este tipo de incidente nunca había ocurrido en la historia del sistema eléctrico peninsular español. Prieto señaló que la recuperación total podría tardar entre seis y diez horas, dependiendo de la complejidad de reactivar progresivamente el sistema sin comprometer su estabilidad.
“Estamos hablando de una situación absolutamente excepcional y extraordinaria. Hasta donde mi memoria alcanza, en la historia de Red Eléctrica nunca había sucedido un incidente de estas características”, afirmó Prieto.
Impacto Regional y Excepciones
Las Islas Baleares, Canarias y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla se salvaron del apagón debido a que sus sistemas eléctricos están apenas conectados con el sistema peninsular. Esto les permitió mantener el suministro energético durante toda la crisis.
En la Península, la electricidad comenzó a restablecerse principalmente por el norte y el sur, alcanzando un consumo de 12.034 megavatios (MW) a las 16:30 horas, lo que representa más del 50 % de la demanda prevista para esa hora.
Transportes Públicos Interrumpidos
El gestor de la infraestructura ferroviaria, Adif, anunció la suspensión de todos los servicios ferroviarios hasta nueva comunicación, pidiendo a los pasajeros que evitaran acudir a las estaciones. Los aeropuertos permanecieron operativos gracias a los sistemas de contingencia y grupos electrógenos, aunque se acumularon retrasos significativos.
Según Aena, el impacto en los vuelos dependió de las dificultades de pasajeros y tripulaciones para llegar a los aeropuertos. Según datos de la web Flight Radar, el aeropuerto de Barajas (Madrid) estuvo inactivo en salidas y llegadas durante al menos media hora en torno a las 12:30 horas, pero luego se fue recuperando el tráfico.
Telecomunicaciones Severamente Afectadas
El sector de las telecomunicaciones también sufrió graves interrupciones. Mientras que Vodafone España mantuvo un 70 % de su actividad gracias a generadores y baterías de reserva, otras operadoras como Telefónica y MasOrange no facilitaron datos específicos. Sin embargo, plataformas como DownDetector registraron múltiples informes de interrupciones en servicios de telecomunicaciones, bancos y aplicaciones móviles.
Reacciones Institucionales
La vicepresidenta de la Comisión Europea (CE) para la Transición Limpia, Teresa Ribera, calificó el apagón como uno de los “más importantes” de los últimos años, aunque descartó que haya indicios de sabotaje o ciberataque.
“No hay nada que nos permita afirmar que hay ningún tipo de boicot o ciberataque”, declaró Ribera antes de comparecer en una comisión del Parlamento Europeo.
Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, convocó una reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad Nacional en La Moncloa tras desplazarse al centro de control de Red Eléctrica para evaluar la situación. Se espera que el Ejecutivo ofrezca un pronunciamiento oficial sobre el incidente en breve.
Un Desafío para la Resiliencia Energética
Este apagón subraya la vulnerabilidad de los sistemas eléctricos interconectados y la necesidad de fortalecer la resiliencia frente a fallos técnicos o eventos inesperados. Aunque las autoridades han descartado causas intencionadas, el incidente plantea preguntas sobre la capacidad de respuesta ante situaciones críticas y la coordinación entre países dentro de la red eléctrica europea.
Mientras tanto, los esfuerzos se centran en completar la recuperación del suministro eléctrico y mitigar los efectos en los sectores afectados, especialmente en transporte y comunicaciones. Este evento será objeto de análisis exhaustivos para prevenir futuros incidentes similares y garantizar la seguridad energética en la región.
Conclusión: Un Día Histórico en el Sector Energético
El apagón masivo de este 28 de abril marca un hito en la historia del sistema eléctrico español y portugués. Aunque las causas exactas aún están bajo investigación, el incidente deja claro la importancia de contar con infraestructuras robustas, sistemas de respaldo eficientes y planes de emergencia claros. La recuperación gradual del suministro ofrece un respiro, pero también una advertencia: la interdependencia energética global exige mayor preparación y cooperación internacional.
MADRID, 28 de abril.- La España peninsular y Portugal han sufrido este lunes un apagón eléctrico masivo e inédito que comenzó a las 12:30 horas, provocando caos en los sistemas de transporte, telecomunicaciones y otros servicios esenciales. Aunque el suministro eléctrico se ha ido recuperando gradualmente, hacia las 16:30 horas se había restablecido aproximadamente el 50 % de la demanda prevista, según informes de Red Eléctrica de España (REE).
Causas del Apagón: Oscilación Extrema en el Flujo de Potencia
El operador del sistema eléctrico español, Red Eléctrica, ha calificado el incidente como “absolutamente excepcional”, atribuyéndolo a una oscilación muy fuerte en el flujo de potencia de las redes eléctricas, cuyo origen aún no ha sido determinado. Esta oscilación provocó la desconexión del sistema eléctrico español del resto de la red europea, lo que generó un colapso generalizado en la Península Ibérica.
Según Eduardo Prieto, director de Servicios a la Operación de REE, este tipo de incidente nunca había ocurrido en la historia del sistema eléctrico peninsular español. Prieto señaló que la recuperación total podría tardar entre seis y diez horas, dependiendo de la complejidad de reactivar progresivamente el sistema sin comprometer su estabilidad.
“Estamos hablando de una situación absolutamente excepcional y extraordinaria. Hasta donde mi memoria alcanza, en la historia de Red Eléctrica nunca había sucedido un incidente de estas características”, afirmó Prieto.
Impacto Regional y Excepciones
Las Islas Baleares, Canarias y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla se salvaron del apagón debido a que sus sistemas eléctricos están apenas conectados con el sistema peninsular. Esto les permitió mantener el suministro energético durante toda la crisis.
En la Península, la electricidad comenzó a restablecerse principalmente por el norte y el sur, alcanzando un consumo de 12.034 megavatios (MW) a las 16:30 horas, lo que representa más del 50 % de la demanda prevista para esa hora.
Transportes Públicos Interrumpidos
El gestor de la infraestructura ferroviaria, Adif, anunció la suspensión de todos los servicios ferroviarios hasta nueva comunicación, pidiendo a los pasajeros que evitaran acudir a las estaciones. Los aeropuertos permanecieron operativos gracias a los sistemas de contingencia y grupos electrógenos, aunque se acumularon retrasos significativos.
Según Aena, el impacto en los vuelos dependió de las dificultades de pasajeros y tripulaciones para llegar a los aeropuertos. Según datos de la web Flight Radar, el aeropuerto de Barajas (Madrid) estuvo inactivo en salidas y llegadas durante al menos media hora en torno a las 12:30 horas, pero luego se fue recuperando el tráfico.
Telecomunicaciones Severamente Afectadas
El sector de las telecomunicaciones también sufrió graves interrupciones. Mientras que Vodafone España mantuvo un 70 % de su actividad gracias a generadores y baterías de reserva, otras operadoras como Telefónica y MasOrange no facilitaron datos específicos. Sin embargo, plataformas como DownDetector registraron múltiples informes de interrupciones en servicios de telecomunicaciones, bancos y aplicaciones móviles.
Reacciones Institucionales
La vicepresidenta de la Comisión Europea (CE) para la Transición Limpia, Teresa Ribera, calificó el apagón como uno de los “más importantes” de los últimos años, aunque descartó que haya indicios de sabotaje o ciberataque.
“No hay nada que nos permita afirmar que hay ningún tipo de boicot o ciberataque”, declaró Ribera antes de comparecer en una comisión del Parlamento Europeo.
Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, convocó una reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad Nacional en La Moncloa tras desplazarse al centro de control de Red Eléctrica para evaluar la situación. Se espera que el Ejecutivo ofrezca un pronunciamiento oficial sobre el incidente en breve.
Un Desafío para la Resiliencia Energética
Este apagón subraya la vulnerabilidad de los sistemas eléctricos interconectados y la necesidad de fortalecer la resiliencia frente a fallos técnicos o eventos inesperados. Aunque las autoridades han descartado causas intencionadas, el incidente plantea preguntas sobre la capacidad de respuesta ante situaciones críticas y la coordinación entre países dentro de la red eléctrica europea.
Mientras tanto, los esfuerzos se centran en completar la recuperación del suministro eléctrico y mitigar los efectos en los sectores afectados, especialmente en transporte y comunicaciones. Este evento será objeto de análisis exhaustivos para prevenir futuros incidentes similares y garantizar la seguridad energética en la región.
Conclusión: Un Día Histórico en el Sector Energético
El apagón masivo de este 28 de abril marca un hito en la historia del sistema eléctrico español y portugués. Aunque las causas exactas aún están bajo investigación, el incidente deja claro la importancia de contar con infraestructuras robustas, sistemas de respaldo eficientes y planes de emergencia claros. La recuperación gradual del suministro ofrece un respiro, pero también una advertencia: la interdependencia energética global exige mayor preparación y cooperación internacional.