SAN SALVADOR, 7 de abril — El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció este domingo una inyección de 1.000 millones de dólares en la economía nacional como parte del acuerdo histórico alcanzado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en febrero pasado. Este paquete financiero, que representa aproximadamente el 2.8 % del Producto Interno Bruto (PIB) del país, busca dinamizar la actividad económica y fortalecer el tejido productivo sin comprometer la estabilidad macroeconómica.
Detalles del Anuncio de Bukele
En un mensaje publicado en la red social X (anteriormente Twitter), Bukele explicó que los fondos serán distribuidos estratégicamente para beneficiar diversos sectores económicos:
- Pagos anticipados a empresas: Los recursos se canalizarán a través de pagos anticipados a micros, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES), que constituyen una parte fundamental de la economía salvadoreña.
- Adelantos a proveedores: Se realizarán adelantos a proveedores del gobierno, lo que permitirá inyectar liquidez en las cadenas de suministro nacionales.
- Amortización de créditos internos: Parte de los fondos será utilizada para amortizar deudas internas, reduciendo presiones financieras en el sistema bancario local.
“Gracias a nuestro acuerdo con el FMI, en los próximos días el gobierno inyectará 1.000 millones de dólares (≈2.8% del PIB) en liquidez adicional a la economía nacional”, declaró Bukele.
El mandatario destacó que esta medida tiene como objetivo dinamizar la actividad económica en el corto plazo, incrementando el flujo de capital en el mercado interno y estimulando el consumo y las ventas en el sector comercial.
Evitar Impactos Inflacionarios
Bukele aseguró que, al tratarse de divisas ya existentes en los mercados internacionales y no de emisión monetaria local, se evitará un impacto inflacionario. Esta estrategia busca garantizar que la inyección de liquidez no genere presiones adicionales sobre los precios ni afecte negativamente la estabilidad económica del país.
“Al tratarse de divisas ya existentes en los mercados internacionales, y no de emisión monetaria local, se evita un impacto inflacionario”, explicó el presidente.
El Acuerdo con el FMI
El acuerdo con el FMI, alcanzado en febrero de 2024, incluye un programa de consolidación fiscal por un monto total de 1.400 millones de dólares, ejecutado bajo el servicio Ampliado del FMI. El primer desembolso, realizado tras la firma del acuerdo, fue de 113 millones de dólares.
Este programa contempla reformas estructurales clave para mejorar la sostenibilidad fiscal del país, entre ellas:
- Reformas en la administración pública: Optimización del gasto público y mejora de la eficiencia en la gestión de recursos.
- Reforma al sistema de pensiones: Ajustes para garantizar la viabilidad financiera del sistema de seguridad social.
El acuerdo marca un hito para El Salvador, que había estado fuera de los programas del FMI durante más de tres años debido a tensiones políticas y económicas, especialmente relacionadas con la implementación del bitcóin como moneda de curso legal.
Impacto Esperado en la Economía Salvadoreña
La inyección de 1.000 millones de dólares busca estimular el consumo y las ventas en el sector comercial, fortaleciendo el tejido productivo y generando un efecto multiplicador en la economía. Además, al priorizar los pagos a MIPYMES y proveedores, el gobierno espera acelerar la recuperación económica post-pandemia y mitigar los efectos de la volatilidad global en sectores clave.
El anuncio llega en un momento en que otros países de la región enfrentan desafíos económicos significativos, como la escasez de divisas en Bolivia y las negociaciones de Argentina con el FMI para acceder a un paquete financiero de 20.000 millones de dólares.
Desafíos Pendientes
Aunque el acuerdo con el FMI representa un avance importante para El Salvador, el gobierno deberá enfrentar varios desafíos para garantizar su éxito:
- Implementación de reformas: La aplicación de reformas estructurales en áreas sensibles, como el sistema de pensiones, podría generar resistencia política y social.
- Sostenibilidad fiscal: Mantener el equilibrio entre la expansión económica y la disciplina fiscal será crucial para evitar retrocesos en los indicadores macroeconómicos.
- Confianza internacional: El Salvador debe continuar construyendo confianza con organismos internacionales y socios comerciales, especialmente tras la controversia generada por la adopción del bitcóin.
Conclusión: Un Paso Hacia la Estabilidad Económica
La inyección de 1.000 millones de dólares en la economía salvadoreña refleja el compromiso del gobierno de Nayib Bukele con la reactivación económica y la estabilidad macroeconómica. Si bien el acuerdo con el FMI representa un logro significativo después de años de tensiones, su éxito dependerá de la capacidad del gobierno para implementar las reformas necesarias y gestionar los recursos de manera eficiente.
Este anuncio llega en un contexto regional marcado por incertidumbre económica, destacando la importancia de políticas fiscales responsables y la cooperación internacional para abordar los desafíos globales. Para El Salvador, este es un paso crucial hacia la consolidación de su economía y la mejora de las condiciones de vida de sus ciudadanos.