MOSCÚ, 20 de marzo.— Rusia lanzó este jueves una advertencia a Estados Unidos, señalando que su decisión de reanudar los suministros de armamento a Ucrania contradice las declaraciones estadounidenses sobre buscar una solución pacífica al conflicto ucraniano. Según la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, el envío de armas al gobierno de Volodímir Zelenski socava cualquier esfuerzo diplomático para resolver la crisis.
Críticas desde Moscú
En una rueda de prensa, Zajárova afirmó que:
“Los suministros de armas al régimen de Kiev van en contra de sus declaradas intenciones de lograr la paz y llevarlo todo al cauce del arreglo diplomático”.
La diplomática rusa subrayó que aquellos que buscan la paz deben abogar por el cese de la militarización de Ucrania, a quien calificó como una “banda terrorista”. Además, recordó que durante su reciente conversación telefónica con Donald Trump, el presidente ruso, Vladímir Putin, destacó que la “condición clave” para evitar una escalada del conflicto es el cese total de la ayuda militar extranjera a Ucrania.
“Es una cuestión de principios. Esperamos que lo escuchen en Washington”, añadió Zajárova.
El Vaivén de la Ayuda Militar de Trump
La polémica surge tras una serie de decisiones contradictorias tomadas por el presidente estadounidense, Donald Trump, respecto a la asistencia militar a Ucrania. A principios de marzo, Trump suspendió temporalmente la ayuda militar a Kiev tras un enfrentamiento público con Zelenski durante su visita a la Casa Blanca. Sin embargo, apenas una semana después, reanudó los suministros, incluyendo baterías antiaéreas Patriot.
Durante una conversación telefónica con Zelenski el miércoles, Trump acordó incrementar el envío de sistemas de defensa antiaérea, un movimiento que ha sido interpretado por Moscú como una provocación directa.
Divergencias entre Rusia y EE.UU.
El Kremlin insistió esta semana en que Putin y Trump discutieron el martes la posibilidad de detener completamente la ayuda militar occidental a Ucrania, algo que el mandatario estadounidense negó rotundamente. En una entrevista con la cadena Fox News, Trump afirmó:
“No, no lo hizo. No hablamos de la ayuda. En realidad, no hablamos de la ayuda en absoluto. Hablamos de muchas cosas, pero la ayuda nunca se mencionó”.
Esta discrepancia entre las versiones de ambos líderes refleja la complejidad de las negociaciones y el desafío de establecer un diálogo constructivo entre ambas partes.
Un Conflicto sin Resolución
La postura de Rusia es clara: considera que el continuo apoyo militar occidental a Ucrania perpetúa el conflicto y obstaculiza cualquier intento de alcanzar una solución diplomática. Por otro lado, Estados Unidos argumenta que su asistencia militar busca fortalecer la capacidad defensiva de Ucrania frente a los avances rusos, mientras trabaja en paralelo para explorar vías de diálogo.
Este cruce de declaraciones coincide con los preparativos para una nueva ronda de conversaciones en Arabia Saudita, donde representantes de Ucrania, Rusia y EE.UU. se reunirán por separado para discutir un posible cese de los ataques contra la infraestructura energética y otras medidas de distensión.
Conclusión: Un Futuro Incierto
La reanudación de los suministros de armas a Ucrania ha exacerbado las tensiones entre Moscú y Washington, poniendo de manifiesto las profundas diferencias entre ambos países sobre cómo abordar el conflicto. Mientras Rusia insiste en que el cese de la ayuda militar es fundamental para avanzar hacia la paz, EE.UU. parece decidido a mantener su apoyo a Kiev, argumentando que esto garantizará la seguridad del país frente a las acciones rusas.
Como expresó Zajárova:
“Esperamos que lo escuchen en Washington”.
Sin embargo, con Trump negando que el tema fuera discutido y reiterando su compromiso con la defensa de Ucrania, queda por verse si estas divergencias podrán superarse en las próximas conversaciones diplomáticas o si profundizarán aún más el estancamiento actual.
El mundo sigue esperando señales claras de que ambas partes están dispuestas a priorizar la paz sobre la confrontación, aunque el camino hacia ese objetivo parece más incierto que nunca.