JERUSALÉN, 5 de marzo.— El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reiteró este martes su doctrina de alcanzar una “victoria total” en los múltiples frentes abiertos por Israel en Oriente Medio, durante la ceremonia de toma de posesión del nuevo jefe del Estado Mayor del Ejército, Eyal Zamir. En un discurso marcado por advertencias y ambiciones estratégicas, Netanyahu subrayó que Israel está decidido a lograr el éxito militar en los “siete frentes” donde enfrenta amenazas, desde Gaza y Líbano hasta Siria, Irak, Yemen e Irán.


La “Guerra de Renacimiento” y los Objetivos de Israel

En su intervención, Netanyahu calificó el conflicto actual como la “Guerra de Renacimiento”, argumentando que sus resultados tendrán implicaciones para las generaciones venideras. Según el mandatario, esta guerra no solo busca neutralizar amenazas inmediatas, sino también garantizar la seguridad futura de Israel frente a adversarios regionales.

«Estamos decididos a lograr el éxito y la victoria en los siete frentes que tenemos abiertos», declaró Netanyahu, refiriéndose a los conflictos contra Hamás en Gaza, Hizbulá en Líbano, milicias proiraníes en Siria, la Resistencia Islámica de Irak, los hutíes de Yemen y el régimen de Irán.

El primer ministro destacó tres objetivos clave en Gaza:

  1. Eliminar completamente las capacidades militares y de gobierno de Hamás.
  2. Asegurar que la Franja de Gaza nunca vuelva a representar una amenaza para Israel.
  3. Recuperar a los rehenes secuestrados durante el ataque masivo del 7 de octubre de 2023 y permitir el retorno seguro de los desplazados.

Además, Netanyahu advirtió sobre las ramas terroristas apoyadas por Irán, afirmando que Israel está decidido a obtener una “victoria decisiva” contra todos aquellos que buscan su destrucción.


Fortalecimiento Militar y Autonomía en Defensa

El primer ministro también anunció que Israel está aumentando su capacidad de producción de armas para reducir su dependencia de factores extranjeros, asegurando así su autosuficiencia en materia de defensa. Este esfuerzo, según Netanyahu, se realiza con el apoyo de Estados Unidos, liderado por el presidente Donald Trump.

«Con el apoyo de nuestros amigos de Estados Unidos, estamos trayendo a Israel armamento muy poderoso y esencial para nuestra seguridad», afirmó, en una ceremonia que contó con la presencia del general Michael Kurilla, al mando del Comando Central de EE.UU.

Este enfoque refleja la determinación de Israel de prepararse para enfrentar tanto las amenazas actuales como las futuras, consolidando su posición como una potencia militar dominante en la región.


El Nuevo Jefe del Ejército: Eyal Zamir

Durante la ceremonia, el nuevo jefe del Estado Mayor, Eyal Zamir, asumió el cargo con una advertencia clara: Hamás aún no ha sido derrotado. Zamir reconoció que la organización terrorista ha sufrido golpes significativos, pero insistió en que la misión no ha sido completada.

«La organización terrorista asesina Hamás ha sufrido un duro golpe, pero aún no ha sido derrotada. La misión aún no ha sido completada», declaró Zamir, quien releva a Herzi Halevi, quien renunció en enero tras el fracaso militar que permitió el ataque masivo del 7 de octubre.

Zamir hereda un ejército enfrentado en múltiples frentes y bajo una intensa presión política y pública para cumplir con los objetivos declarados por Netanyahu.


Advertencias del Ministro de Defensa: Israel Katz

El ministro de Defensa, Israel Katz, también intervino en la ceremonia, lanzando un ultimátum claro a Hamás: si el grupo islamista no libera a los rehenes, Israel volverá a la lucha con una fuerza sin precedentes.

«Si Hamás no libera a los rehenes, volveremos a la lucha y se enfrentarán a las Fuerzas de Defensa de Israel con fuerzas y en formas que nunca han conocido, hasta una derrota completa», advirtió Katz.

El ministro reiteró que Israel “nunca” permitirá que Hamás controle Gaza, dejando claro que cualquier intento de restablecer el control del grupo en la Franja será respondido con una acción militar implacable.

Katz también enfatizó que Israel no regresará al statu quo anterior al 7 de octubre, ni en el sur (Gaza) ni en el norte (Líbano), señalando que esta es la misión central que espera del nuevo jefe del Estado Mayor.


Contexto Regional: Una Región en Conflicto Permanente

El discurso de Netanyahu y las declaraciones de Katz y Zamir reflejan la complejidad del escenario regional en el que Israel opera. Desde el ataque sorpresa de Hamás en octubre de 2023, Israel ha intensificado sus operaciones militares no solo en Gaza, sino también en Líbano y Siria, donde combate a Hizbulá y otras milicias aliadas de Irán.

El conflicto en Gaza ha dejado decenas de miles de muertos, millones de desplazados y una crisis humanitaria sin precedentes. Al mismo tiempo, las tensiones en la frontera norte con Líbano han escalado, con enfrentamientos frecuentes entre Israel y Hizbulá.


Hacia una Victoria Definitiva o un Conflicto Prolongado

Las declaraciones de Netanyahu y sus principales líderes militares subrayan la determinación de Israel de no retroceder ante las amenazas regionales. Sin embargo, la ambición de una “victoria total” plantea interrogantes sobre la duración y el costo humano y político de esta estrategia.

Mientras Israel persigue sus objetivos militares, la comunidad internacional observa con preocupación cómo esta ofensiva podría afectar la estabilidad de toda la región. La llegada de Eyal Zamir al frente del Ejército marca un nuevo capítulo en esta guerra multifacética, donde el equilibrio entre seguridad nacional y consecuencias geopolíticas seguirá siendo un desafío crítico para el gobierno israelí.

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