Gaza, 13 feb.- El movimiento islamista Hamas anunció este jueves que procederá con la liberación del siguiente grupo de rehenes israelíes según lo previsto, allanando el camino para mantener vigente la frágil tregua en la Franja de Gaza. Según un comunicado del grupo, tres rehenes israelíes serán liberados el próximo sábado tras la intervención de mediadores egipcios y qataríes, quienes aseguraron que trabajarán para “eliminar todos los obstáculos” que han complicado el cumplimiento del acuerdo.
Este anuncio llega después de días de tensión, cuando Hamas amenazó con retrasar las liberaciones debido a supuestas violaciones por parte de Israel, incluyendo la falta de entrega de tiendas de campaña y refugios temporales prometidos como parte del alto el fuego. A su vez, Israel, respaldado por el presidente estadounidense Donald Trump, había advertido que reanudaría su ofensiva militar si no se avanzaba en la liberación de los cautivos.
El Papel de Egipto y Qatar: Mediadores Clave
La disputa parecía estar en vías de resolverse gracias a los esfuerzos diplomáticos de Egipto y Qatar, países árabes que han actuado como intermediarios clave entre Israel y Hamas desde el inicio del conflicto. Según medios estatales egipcios, camiones cargados con viviendas provisionales, suministros médicos y equipos pesados para retirar escombros ya están siendo enviados hacia Gaza a través del paso fronterizo de Rafah.
Hamas declaró que sus delegados mantuvieron conversaciones en El Cairo con funcionarios egipcios y que también coordinaron con el primer ministro de Qatar para garantizar el flujo continuo de ayuda humanitaria al territorio palestino. Estos gestos buscan cumplir con los términos del alto el fuego acordado en enero, 15 meses después de que comenzara la guerra.
Un Alto el Fuego Frágil y una Propuesta Controversial
Aunque el anuncio de Hamas permite que el alto el fuego continúe por ahora, el futuro del acuerdo sigue siendo incierto. La primera fase de la tregua está programada para concluir a principios de marzo, y aún no se han iniciado negociaciones sustanciales sobre la segunda fase, en la que se espera que Hamas libere a los decenas de rehenes restantes a cambio del fin definitivo de la guerra.
Sin embargo, la propuesta del presidente Donald Trump ha añadido más incertidumbre al proceso. Su plan de expulsar a cerca de dos millones de palestinos de Gaza y reasentarlos en otros países ha sido recibido con fuerte oposición tanto por los palestinos como por los países árabes. Grupos de derechos humanos han advertido que esta estrategia podría constituir un crimen de guerra bajo el derecho internacional.
Mientras tanto, aliados de extrema derecha del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, han pedido que se reanude la guerra tras la primera fase del alto el fuego, con el objetivo de implementar el plan de Trump y erradicar completamente a Hamas, que sigue controlando Gaza pese a haber sobrevivido a una de las campañas militares más devastadoras de las últimas décadas.
El Conflicto en Números: Una Crisis Humanitaria Sin Precedentes
La guerra, que comenzó el 7 de octubre de 2023 con un ataque sorpresa de Hamas contra Israel, ha dejado un saldo devastador:
- 1.200 personas murieron en Israel, en su mayoría civiles, y unas 250 fueron secuestradas.
- Más de 48.000 palestinos han muerto en Gaza, según cifras del Ministerio de Salud local, aunque Israel afirma que muchos de ellos eran combatientes.
- Amplias zonas de Gaza han sido arrasadas por la ofensiva israelí, desplazando al 90% de la población del territorio en su punto álgido.
De los rehenes iniciales, más de la mitad han sido liberados mediante acuerdos con Hamas u otras negociaciones, mientras que ocho fueron rescatados y decenas de cuerpos recuperados. Sin embargo, aún quedan 73 rehenes, de los cuales se cree que alrededor de la mitad han fallecido. Casi todos los supervivientes son hombres, incluidos soldados israelíes.
Una “Nueva Guerra” en el Horizonte
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, advirtió que una nueva fase de combates sería mucho peor que la anterior si Hamas no cumple con sus compromisos. “Se desatará el infierno”, afirmó Katz, señalando que cualquier reanudación de la guerra tendría como objetivo final derrotar completamente a Hamas e implementar la visión de Trump de un desplazamiento masivo de la población palestina.
Con menos rehenes en Gaza, Israel tendría mayor libertad de acción militar y enfrentaría menos restricciones por parte de Estados Unidos, especialmente bajo la administración Trump, que ha eliminado las limitaciones impuestas por el gobierno de Biden sobre transferencias de armas. Además, Trump ha autorizado la venta de armamento por valor de 7.000 millones de dólares a Israel, consolidando su apoyo incondicional al Estado hebreo.
Visión Futurista de Trump para Gaza
Trump ha sugerido que, tras el conflicto, Israel transferiría el control de Gaza a Estados Unidos, que transformaría el territorio en una especie de “Riviera de Oriente Medio”. Este ambicioso plan incluye el reasentamiento de la población palestina en otros países árabes, financiado por naciones ricas de la región.
Por su parte, el ministro israelí de Finanzas, Bezalel Smotrich, ha abogado por la “migración voluntaria” de un gran número de palestinos de Gaza y la reinstauración de asentamientos judíos en el territorio. Estas declaraciones han exacerbado las tensiones y generado preocupación sobre el futuro de los palestinos en la región.
Un Futuro Incierto para Gaza y la Región
Mientras tanto, cientos de miles de palestinos que regresaron a sus hogares tras el alto el fuego solo encontraron ruinas, escombros y munición sin detonar. La crisis humanitaria en Gaza sigue siendo crítica, con escasez de alimentos, agua potable y servicios médicos básicos.
El anuncio de Hamas de liberar a más rehenes es un paso positivo, pero el alto el fuego sigue siendo extremadamente frágil. Con posiciones tan polarizadas entre Israel, Hamas y los mediadores internacionales, el riesgo de una nueva escalada del conflicto permanece latente. Lo que ocurra en las próximas semanas determinará no solo el destino de Gaza, sino también el equilibrio político y humanitario en toda la región.