FREDERICTON, 21 enero.- Una masa de aire ártico ha descendido hacia el sur, cubriendo desde Nuevo Brunswick hasta el este de Alberta con temperaturas gélidas y sensaciones térmicas de hasta -50 °C, provocando cierres de escuelas y advertencias de seguridad en todo el país.
Según Environment Canada, las sensaciones térmicas alcanzan -40 °C en Alberta, -45 °C en Saskatchewan y hasta -50 °C en partes de Manitoba y el norte de Ontario. Peter Kimbell, meteorólogo de Environment Canada, explicó que estas olas de frío ocurren cuando masas de aire ártico se desplazan hacia el sur, fenómeno que popularmente se conoce como “vórtice polar”.
Efectos generalizados en todo Canadá
Anais Orsi, científica atmosférica de la Universidad de Columbia Británica, señaló que estas olas de frío están asociadas con una corriente en chorro altamente ondulada que permite que el aire helado del Ártico penetre en latitudes más bajas. Aunque el cambio climático ha reducido la frecuencia y severidad de inviernos extremadamente fríos, aún pueden producirse episodios como este.
En partes del país, la ola de frío fue precedida por intensas nevadas. En Nuevo Brunswick cayeron 25 centímetros de nieve, mientras que la Isla del Príncipe Eduardo acumuló 15 centímetros. Las condiciones climáticas extremas han llevado al cierre de escuelas y la suspensión del transporte escolar en provincias como Manitoba y Nuevo Brunswick.
Medidas de seguridad y advertencias
La policía ha emitido recomendaciones urgentes para evitar viajes no esenciales y prepararse adecuadamente al salir al exterior. Se insta a los conductores a mantener los tanques de combustible llenos y a llevar kits de emergencia en sus vehículos, que incluyan mantas, palas y cables de arranque.
En Toronto, las autoridades han desplegado equipos de asistencia para ayudar a las personas sin hogar, ofreciendo mantas, sacos de dormir y acceso a refugios temporales.
Perspectivas para los próximos días
Environment Canada indicó que las temperaturas podrían moderarse ligeramente a partir del martes, aunque seguirán siendo frías. Enero ha registrado temperaturas más bajas de lo normal en el suroeste de Ontario y las praderas del sur, pero más cálidas de lo habitual en el norte de Quebec y Nunavut.
Aunque se desconoce cómo el cambio climático afectará la frecuencia de estos eventos en el futuro, los expertos coinciden en que los inviernos extremos serán menos frecuentes y severos en general.