China reafirma que «Taiwán nunca ha sido un país, ni jamás lo será»

0

Pekín, 10 oct.- Este jueves, China reafirmó su posición respecto a Taiwán, asegurando que “nunca ha sido un país, ni jamás lo será”. Esta declaración surge en respuesta a las recientes afirmaciones del presidente taiwanés, William Lai, quien ha promovido ideas separatistas en favor de la independencia de la isla, calificando estas declaraciones como una provocación destinada a aumentar las tensiones en la región.

Durante una conferencia de prensa, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, criticó las palabras de Lai, señalando que buscan “romper los lazos históricos” entre ambos lados del estrecho de Taiwán. “No importa lo que diga Lai Ching-te, no puede cambiar el hecho objetivo de que ambos lados del Estrecho pertenecen a una sola China”, afirmó Mao.

La funcionaria reiteró que la posición de China sobre Taiwán es inamovible, indicando que “el principio de una sola China es una norma básica de las relaciones internacionales y un consenso universal”. Además, advirtió que cualquier intento de independencia representa un “callejón sin salida” y que la reunificación de China es “inevitable”.

Mao también advirtió que la República Popular China no tolerará que ningún país, a través de relaciones diplomáticas, apoye movimientos separatistas en Taiwán. “Instamos a los políticos extranjeros a corregir sus acciones y cesar el apoyo a la independencia de Taiwán”, añadió, enfatizando que cualquier interacción oficial con Taiwán solo exacerbará las tensiones en el Estrecho.

Durante el acto conmemorativo por el Día Nacional de Taiwán, celebrado este jueves, Lai reafirmó la soberanía de la isla, destacando que es una tierra de “libertad” y “democracia” que no está subordinada a China. En su discurso, subrayó su compromiso de salvaguardar la soberanía y el desarrollo de Taiwán frente a cualquier intento de anexión, al tiempo que abogó por mantener la paz y la estabilidad en el Estrecho.

Lai también expresó su disposición a trabajar con China en temas como el cambio climático y la seguridad regional, siempre defendiendo la igualdad y dignidad de Taiwán. Sin embargo, en los días previos a su discurso, generó controversia al declarar que Taiwán es un “país soberano e independiente”, enfatizando que no se puede considerar a la República Popular China como la “madre patria” de los taiwaneses.

Como respuesta a estas declaraciones, Pekín acusó a Lai de intentar romper los lazos históricos con China y aumentó la presión militar, llevando a cabo dos patrullas conjuntas en el estrecho de Taiwán en los últimos cinco días.

Publicidad