Jerusalén, 9 de agosto de 2024 — Comentarios recientes del ultraderechista ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, han provocado una ola de condenas por parte de aliados occidentales de Israel. En un discurso del lunes, Smotrich insinuó que provocar la hambruna en la Franja de Gaza, que alberga a más de dos millones de personas, podría considerarse “justo y moral” hasta que se resuelva el tema de los rehenes capturados por Hamás durante el ataque del 7 de octubre en el sur de Israel.
Durante una conferencia de apoyo a los asentamientos judíos, Smotrich expresó que, a pesar de que la comunidad internacional no permitiría privar de alimentos a los habitantes de Gaza, en un contexto de guerra, tal medida podría ser vista como justa. “En la realidad global de hoy, no es posible manejar una guerra —nadie nos permitirá privar de alimentos a dos millones de personas, aunque esto podría ser justo y moral hasta que ellos devuelvan a los rehenes”, dijo Smotrich.
Las declaraciones de Smotrich, un miembro clave de la coalición gobernante del primer ministro Benjamin Netanyahu y conocido por su apoyo a la reocupación de Gaza y la reconstrucción de los asentamientos judíos, han sido ampliamente criticadas. La Unión Europea se unió a las críticas, condenando los comentarios y calificando la privación deliberada de alimentos a los civiles como un “crimen de guerra”.
Smotrich, que también apoya la migración voluntaria de grandes cantidades de palestinos fuera del territorio, ha estado en el centro de la controversia debido a sus posiciones extremas. Su discurso resalta la creciente tensión y las divisiones sobre cómo abordar el conflicto israelí-palestino, en un contexto de intensificación de las hostilidades y las preocupaciones internacionales sobre los derechos humanos en la región.