Quito, 23 junio.- El gobierno de Ecuador ha ofrecido una recompensa de un millón de dólares por información que permita capturar a Federico Gómez, alias “Fede”, uno de los criminales más buscados del país, quien se fugó el pasado viernes de la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, una de las cárceles más peligrosas del país.
En un video difundido en redes sociales, el ministro de Defensa, Gian Carlo Lofredo, advirtió que la recompensa también será entregada en caso de que alias Fede sea abatido por las fuerzas del orden. “Es uno de los criminales más peligrosos de Ecuador. Lidera estructuras delictivas que han sembrado muerte y terror”, afirmó.
Un prontuario criminal y una fuga polémica
Alias Fede es señalado como líder del grupo criminal “Las Águilas”, organización incluida por el gobierno en la lista de 22 grupos calificados como terroristas desde inicios de 2024. Estaba detenido desde enero por delitos relacionados con el narcotráfico, y tiene antecedentes por asesinato, tráfico de drogas, armas de fuego, asociación ilícita y robo.
La fuga, ocurrida en circunstancias aún no esclarecidas, ha puesto en entredicho la seguridad del sistema penitenciario. Este domingo, un juez ordenó prisión preventiva para 22 personas, incluidos militares y personal del organismo de control penitenciario, por su presunta participación en la evasión.
Crisis penitenciaria bajo el gobierno de Noboa
Desde que Daniel Noboa asumió la presidencia en noviembre de 2023, tres cabecillas criminales se han fugado de cárceles ecuatorianas: Adolfo Macías, alias “Fito”, líder de Los Choneros; Fabián Colón Pico, de Los Lobos (posteriormente recapturado); y ahora alias Fede, de Las Águilas.
La Penitenciaría del Litoral, donde se encontraba detenido Gómez, ha sido escenario de masacres carcelarias que han dejado cientos de muertos en los últimos años, y es considerada uno de los focos más críticos de la violencia carcelaria en la región.
El gobierno ha intensificado sus operativos y reforzado la presencia militar en varios penales, pero la fuga de alias Fede vuelve a poner de relieve la profunda crisis del sistema penitenciario y de seguridad en Ecuador, marcado por la corrupción interna y el poder creciente de las bandas criminales.
La Fiscalía, por su parte, continúa con las investigaciones para determinar cómo se facilitó la fuga y quiénes participaron en ella, mientras el país se mantiene en máxima alerta por el paradero de uno de los hombres más buscados de Ecuador.