REDACCIÓN TECNOLOGÍA, 20 ABRIL.- La compañía china Huawei, líder mundial en infraestructuras de telecomunicaciones y dispositivos inteligentes, se ha convertido en uno de los principales objetivos de Washington dentro de una disputa comercial que comenzó durante el primer mandato del expresidente Donald Trump (2017-2021). Hoy, esta rivalidad geopolítica tiene a América Latina como uno de sus escenarios más estratégicos.


El Origen del Conflicto

La presión estadounidense sobre Huawei comenzó en 2018, cuando Trump prohibió el uso de dispositivos de la empresa y otras compañías chinas, como ZTE e Hytera, en dependencias gubernamentales. Un año después, el Gobierno acusó a Huawei de fraude y de violar las sanciones internacionales contra Irán, incluyéndola en la lista negra comercial (Entity List) del Departamento de Comercio por considerarla una amenaza a la seguridad nacional.

Washington argumenta que Huawei, fundada en 1987 y con más de 207.000 empleados en todo el mundo, podría facilitar espionaje a favor del Gobierno chino debido a su supuesta relación con el Partido Comunista de China. Aunque Huawei niega estas acusaciones, las tensiones han escalado significativamente.

Las sanciones impuestas bajo la administración Trump prohibieron a empresas estadounidenses hacer negocios con Huawei, lo que afectó gravemente su acceso a tecnologías esenciales. Gigantes como Google, Intel y Microsoft cortaron lazos o restringieron servicios clave, como el sistema operativo Android, impactando su competitividad global, especialmente en mercados como América Latina.


Investigaciones Recientes

A finales de marzo, la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) de EE.UU. abrió una investigación sobre Huawei y otras empresas tecnológicas chinas, sospechosas de operar en territorio estadounidense violando las restricciones impuestas por motivos de seguridad nacional.

En respuesta, César Funes, vicepresidente de Asuntos Públicos de Huawei para América Latina, aseguró a EFE que la compañía respeta las leyes y normativas en todos los países donde opera. “Nuestros equipos legales se encargarán de responder cuando se nos requiera”, declaró.


América Latina: Un Frente Estratégico

América Latina se ha convertido en un campo de batalla clave en la disputa comercial entre China y EE.UU. Antes de las sanciones, Huawei tenía una fuerte presencia en la región, liderando la venta de dispositivos y desempeñando un papel crucial en el despliegue de redes 4G y 5G.

Un estudio de la Universidad de Navarra (España) reveló en mayo de 2024 que hasta un 70% de las conexiones 4G-LTE en América Latina dependen de infraestructuras de Huawei, representando aproximadamente 350 millones de usuarios. Esta penetración masiva plantea desafíos significativos para los intentos de EE.UU. de reducir la influencia china en la región.

Durante su primer mandato, Trump advirtió que sancionaría a los países que permitieran la participación de Huawei en licitaciones de infraestructura 5G. Aunque Brasil recibió una advertencia formal, solo Costa Rica vetó oficialmente a la multinacional china.

“Los desafíos diarios nos exigen más rigor y creatividad”, admitió Funes. “Cada vez que las restricciones se endurecen, nosotros reforzamos nuestro compromiso con el trabajo y la innovación”.


Europa También Vigila

La presión sobre Huawei no se limita a América Latina. En Europa, la vigilancia también se ha intensificado. El pasado 13 de marzo, la Fiscalía Federal belga llevó a cabo una operación que incluyó 21 registros en Bruselas, Flandes, Valonia y Portugal. Las oficinas de Huawei en Bruselas y los domicilios de varios de sus lobistas fueron inspeccionados, así como dos despachos en el Parlamento Europeo pertenecientes a asistentes parlamentarios implicados en una investigación por una supuesta trama de sobornos.

Según las autoridades belgas, la trama habría operado desde 2021, utilizando métodos como pagos por posiciones políticas, regalos excesivos (viajes, comidas, entradas a partidos de fútbol) y otros incentivos para influir en decisiones políticas en beneficio de Huawei.

Funes reiteró la postura de la empresa: “Respetamos todos los procesos formales. Nuestro equipo legal se encargará del tema, como lo ha hecho en otras regiones”.


Expansión Regional y Dependencia Tecnológica

Huawei ha expandido significativamente su operación en América Latina y el Caribe, con presencia en más de 20 países y más de 2.000 empleados en la región. Según Funes, la compañía lleva más de 27 años invirtiendo en distintos sectores del mercado latinoamericano, firmando acuerdos para desplegar redes 4G y 5G, construir centros de datos y ofrecer programas de capacitación tecnológica.

Sin embargo, su crecimiento no está exento de controversias. Algunas voces críticas señalan el nivel de dependencia tecnológica que estos vínculos podrían generar en países de la región. Pese a ello, Huawei continúa fortaleciendo su presencia con una estrategia enfocada en infraestructura digital y alianzas con actores públicos y privados.


Conclusión

La disputa entre EE.UU. y China por el control tecnológico y económico tiene a Huawei como uno de sus ejes centrales, con América Latina como un escenario estratégico. Mientras Washington busca limitar la influencia de la empresa china, Huawei responde con innovación y expansión regional, consolidando su posición en mercados clave como el latinoamericano.

El futuro de esta rivalidad dependerá de cómo evolucionen las relaciones entre las superpotencias y la capacidad de Huawei para adaptarse a un entorno cada vez más hostil. Por ahora, la compañía sigue siendo un actor fundamental en el desarrollo tecnológico global, aunque enfrenta desafíos significativos en su camino hacia la consolidación.

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