BUENOS AIRES, 15 de abril — El peso argentino experimentó una depreciación cercana al 10 % este lunes, durante el debut del nuevo esquema cambiario implementado por el Gobierno de Javier Milei, tras la eliminación parcial de las restricciones al acceso a divisas conocidas como el ‘cepo cambiario’. Este cambio histórico fue posible gracias a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y otras entidades financieras internacionales, que inyectarán recursos para fortalecer las reservas del Banco Central.
Un Paso Hacia la Liberalización Cambiaria
En declaraciones radiales, el presidente Milei calificó este día como “muy importante” para Argentina, destacando que el levantamiento del cepo representa “romper otra cadena más, la más pesada y difícil”. Las restricciones cambiarias, vigentes desde 2011, habían limitado severamente la capacidad de los ciudadanos para acceder a dólares en el mercado formal, generando distorsiones económicas y alimentando mercados alternativos como el ‘dólar blue’.
El viernes pasado, Milei anunció la apertura del cepo tras alcanzar un acuerdo con el FMI que incluye préstamos por 20.000 millones de dólares, además de financiamiento adicional del Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Estos recursos buscan estabilizar la economía argentina y respaldar la transición hacia un régimen de tipo de cambio más flexible.
Nuevo Régimen Cambiario: Flotación Administrada con Bandas
Desde este lunes, el peso comenzó a operar bajo un sistema de flotación administrada entre bandas, establecidas entre 1.000 y 1.400 pesos por dólar estadounidense en el mercado oficial mayorista. Según fuentes oficiales, el Banco Central no tuvo que intervenir en su primer día, ya que la cotización se mantuvo dentro de los márgenes establecidos.
Sin embargo, el impacto inicial del nuevo esquema fue significativo:
- Dólar oficial: El precio del dólar subió 132,50 pesos, cerrando en 1.230 pesos por unidad en el estatal Banco Nación, lo que representa un aumento del 12 % y una depreciación del 10,9 % del peso en términos prácticos.
- Mercado informal: Contrariamente al comportamiento del dólar oficial, el denominado ‘dólar blue’ registró una caída de 90 pesos, cotizando en 1.285 pesos por unidad. Este descenso refleja una reducción de la brecha cambiaria, que históricamente había superado el 100 %.
- Dólares financieros: Los llamados dólares financieros también retrocedieron, con caídas entre el 6,1 % y el 6,7 % en sus cotizaciones.
La depreciación del peso resultó menor a la proyectada por muchos analistas, quienes anticipaban un ajuste de entre el 15 % y 20 %. Este resultado más moderado podría mitigar el impacto inflacionario derivado del salto cambiario.
Optimismo en el Mercado Financiero
Las medidas anunciadas por el Gobierno generaron un notable optimismo entre inversores, traduciéndose en fuertes alzas en los mercados de capitales:
- Acciones argentinas: En la Bolsa de Buenos Aires, las acciones registraron aumentos generalizados de hasta el 18 %.
- Bonos soberanos: Los títulos de deuda pública avanzaron un promedio del 8 % en sus cotizaciones en dólares.
El economista Gustavo Ber destacó que el anuncio del levantamiento del cepo fue interpretado positivamente por los inversores, considerándolo un “gran paso dentro del proceso de normalización económica”. Según Ber, estas medidas podrían mejorar las valuaciones de activos financieros y atraer mayores inversiones privadas desde el exterior en el mediano plazo.
Desafíos Logísticos en el Primer Día
A pesar del entusiasmo, la primera jornada del nuevo esquema no estuvo exenta de inconvenientes. Algunos usuarios reportaron problemas para comprar divisas a través de plataformas virtuales bancarias debido a colapsos o falta de actualización de los sistemas. Además, en el distrito financiero de Buenos Aires, varias casas de cambio no exhibieron valores claros de compra y venta al inicio de la jornada, evidenciando cierta incertidumbre inicial.
¿Qué Implica Esto para el Futuro?
¿Podrá Argentina consolidar esta transición hacia un sistema cambiario más libre? El éxito del nuevo esquema dependerá de la capacidad del Gobierno de mantener la confianza de los mercados y evitar desequilibrios macroeconómicos. La reducción de la brecha cambiaria y la estabilización del tipo de cambio son pasos cruciales para controlar la inflación y recuperar la competitividad de la economía.
Con el respaldo del FMI y otras instituciones financieras, el Gobierno de Milei enfrenta un momento decisivo para demostrar que puede equilibrar liberalización económica con estabilidad social. Aunque los resultados iniciales han sido positivos, los próximos meses serán clave para determinar si estas reformas logran generar un impacto duradero en la economía argentina.
Argentina da un paso audaz hacia la liberalización financiera, pero el camino hacia la recuperación económica sigue siendo complejo y lleno de desafíos.