LONDRES, 13 de marzo.— La Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) han reportado un alarmante aumento en los casos de sarampión en Europa y Asia Central durante 2024. Con 127.350 infecciones confirmadas, esta cifra representa el doble de los casos registrados en 2023 y es la más alta desde 1997. Este resurgimiento del sarampión ha generado preocupación entre los expertos en salud pública, quienes advierten que la baja cobertura de vacunación está alimentando la propagación de la enfermedad.
Rumania y Kazajistán: Los Epicentros de la Crisis
Según el informe publicado el jueves por la OMS y UNICEF, Rumania lidera la lista de países con mayor número de casos, reportando más de 30.000 infecciones. Le sigue Kazajistán, con 28.147 casos, lo que refleja la magnitud de la crisis en la región.
El análisis también reveló que aproximadamente el 40% de los casos afectaron a niños menores de 5 años, una población especialmente vulnerable a complicaciones graves como neumonía, encefalitis y deshidratación. Más de la mitad de los infectados requirieron hospitalización, evidenciando la severidad de la enfermedad.
“El sarampión ha regresado, y es una llamada de atención”, afirmó el doctor Han Kluge, director de la OMS para Europa. “Sin altas tasas de vacunación, no hay seguridad sanitaria”.
La Pandemia y el Descenso en las Vacunaciones
La pandemia de COVID-19 tuvo un impacto significativo en los programas de vacunación a nivel mundial. Durante este período, muchos países experimentaron una caída en la cobertura de vacunas debido a restricciones de movilidad, cierre de clínicas y temor al contagio. En 2023 y 2024, estas interrupciones se tradujeron en un aumento alarmante de casos de enfermedades prevenibles por vacuna, como el sarampión.
En países como Bosnia y Herzegovina y Montenegro, menos del 70% y el 50% de los niños, respectivamente, han sido vacunados contra el sarampión en los últimos cinco años. Los científicos estiman que para prevenir brotes, más del 95% de la población necesita estar inmunizada. Sin embargo, muchas regiones están muy por debajo de este umbral crítico.
“Incluso una pequeña disminución en la aceptación de la vacuna puede tener consecuencias devastadoras”, advirtió Ben Kaastan-Dabush, profesor asistente en salud global en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres.
Desinformación y Desconfianza en las Vacunas
Las preocupaciones sobre la seguridad de las vacunas han persistido durante décadas, exacerbadas por teorías infundadas como las planteadas en el artículo retractado de Andrew Wakefield en 1998, que falsamente vinculaba la vacuna triple vírica (sarampión, paperas y rubéola) con el autismo. Aunque numerosos estudios han demostrado que no existe un vínculo causal, la desinformación continúa circulando rápidamente, especialmente en plataformas digitales.
Funcionarios británicos señalaron que solo en el Reino Unido ya se han reportado más de 200 casos de sarampión en lo que va de año, y se espera que este número aumente. En respuesta, las autoridades han lanzado campañas para fomentar la vacunación, subrayando que nunca es demasiado tarde para recibir las dosis necesarias.
“Nunca es demasiado tarde para vacunarse”, reiteró Kaastan-Dabush, destacando la importancia de combatir la desinformación para proteger a las comunidades.
Impacto Global: Brote en Estados Unidos
El resurgimiento del sarampión no se limita a Europa y Asia Central. En Estados Unidos, los brotes en estados como Texas y Nuevo México han llevado a más de 250 casos confirmados, incluidos dos fallecimientos de personas que no estaban vacunadas. Estos episodios subrayan la necesidad urgente de mejorar las tasas de vacunación a nivel mundial.
Consecuencias y Medidas Urgentes
El sarampión es una de las enfermedades más contagiosas del mundo, transmitida a través de gotitas respiratorias en el aire. Puede causar síntomas leves, como fiebre, tos y erupciones cutáneas, pero también complicaciones graves que ponen en peligro la vida, especialmente en niños pequeños y personas con sistemas inmunológicos debilitados.
Para abordar esta crisis, la OMS y UNICEF han instado a los gobiernos a:
- Incrementar las tasas de vacunación: Implementar campañas masivas para alcanzar al menos el 95% de cobertura en cada comunidad.
- Combatir la desinformación: Educar a las poblaciones sobre la seguridad y efectividad de las vacunas.
- Fortalecer los sistemas de salud: Garantizar que los servicios de vacunación sean accesibles y confiables, incluso en zonas remotas.
Conclusión: Una Crisis Prevenible
El alarmante aumento de casos de sarampión en Europa, Asia Central y otras partes del mundo es un recordatorio de que las enfermedades prevenibles por vacuna siguen siendo una amenaza real. Con herramientas médicas disponibles para erradicar el sarampión, los expertos insisten en que esta crisis es completamente evitable si se prioriza la vacunación universal.
“El sarampión no discrimina, pero la vacunación puede salvar vidas”, concluyó el doctor Kluge, haciendo un llamado a la acción colectiva para proteger a las generaciones futuras.
Mientras tanto, la comunidad internacional observa con preocupación el avance de esta epidemia, consciente de que el éxito en la lucha contra el sarampión depende de la cooperación global y el compromiso de todos los sectores de la sociedad.