El Demokraatit Sorprende en las Elecciones de Groenlandia: Un Nuevo Escenario Político

0

NUUK, Groenlandia, 12 de marzo.— El partido liberal opositor Demokraatit, que aboga por un independentismo moderado, se ha alzado como el gran ganador de las elecciones parlamentarias en Groenlandia con el 29,9% de los votos, según el recuento oficial completo divulgado este miércoles por la Autoridad Electoral. Este resultado marca un cambio histórico en la política groenlandesa, ya que es la primera vez desde la aprobación del Estatuto de Autonomía en 1979 que ni el Siumut ni el Inuit Ataqatigiit (IA) lideran los resultados electorales.


Un Cambio Inesperado en el Tablero Político

El triunfo del Demokraatit fue una sorpresa absoluta. El partido triplicó sus votos respecto a los comicios de 2021, cuando obtuvo apenas un 9,9%, y pasó del cuarto lugar al primer puesto. Su líder, Jens-Frederik Nielsen, destacó el mensaje de unidad tras conocerse los resultados:

«Queremos extender la mano a todos. Estamos en un tiempo en el que debemos estar juntos. De parte de Demokraatit estamos abiertos a hablar con todos los partidos y buscar la unión, especialmente considerando lo que ocurre en el extranjero», declaró a la televisión pública groenlandesa KNR.

Nielsen también abogó por mantener una relación “tranquila” con Estados Unidos y subrayó la necesidad de fortalecer la economía local antes de avanzar hacia la independencia total de Dinamarca.

En segundo lugar quedó el Naleraq, un partido que defiende una separación rápida de Dinamarca, con el 24,5% de los votos. Este resultado representa un avance significativo para el Naleraq, que duplicó sus apoyos respecto a las elecciones anteriores.


El Declive de los Partidos Tradicionales

Los dos partidos que conformaban el gobierno de izquierda durante los últimos tres años sufrieron un desplome electoral notable:

  • Inuit Ataqatigiit (IA), liderado por el presidente autonómico Múte B. Egede, quedó en tercer lugar con el 21,4%, una caída de 15 puntos porcentuales respecto a 2021.
  • Su socio de coalición, el histórico Siumut, que dominó la política groenlandesa durante décadas, obtuvo solo el 14,7%, la mitad de los votos que consiguieron hace cuatro años.

El declive de estas fuerzas tradicionales refleja un creciente descontento entre los votantes frente a la gestión económica y política de los últimos años, así como un cambio generacional en las preferencias políticas.

Por su parte, el liberal Atassut, también moderado en el tema de la independencia, logró un modesto incremento de cuatro décimas hasta alcanzar el 7,3%. En cambio, el Qulleq, un partido pequeño con posturas similares al Naleraq, no logró superar la barrera electoral al obtener solo el 1,1%.


Un Contexto Marcado por el Interés Internacional

Las elecciones estuvieron marcadas por el interés mostrado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien reavivó el debate sobre la soberanía de Groenlandia al proponer públicamente la adquisición de la isla en años anteriores. Aunque esta idea fue ampliamente rechazada por los groenlandeses —el 85% se opone según encuestas recientes—, el tema influyó en la campaña electoral.

Todos los partidos criticaron las declaraciones de Trump, considerándolas una falta de respeto hacia Groenlandia. Sin embargo, algunos candidatos vieron en ellas una oportunidad para discutir el futuro económico y geopolítico de la isla, especialmente ante el deshielo del Ártico y su potencial estratégico.


Participación Histórica y Desafíos Futuros

La participación electoral alcanzó el 70,9%, cinco puntos más que en 2021, lo que demuestra un renovado interés de los ciudadanos en definir el rumbo político de Groenlandia. Con poco menos de 57,000 habitantes distribuidos en 2,2 millones de kilómetros cuadrados, la isla enfrenta enormes desafíos económicos y sociales:

  • Depende en gran medida de la ayuda económica de Dinamarca, que aporta cerca del 40% de sus ingresos.
  • La pesca representa el 90% de las exportaciones, lo que deja a la economía vulnerable a fluctuaciones externas.

El nuevo gobierno deberá equilibrar la aspiración de independencia con la realidad de la dependencia financiera hacia Dinamarca, mientras explora alternativas sostenibles para diversificar la economía.


Hacia una Coalición y Negociaciones

Tras el resultado, todas las formaciones han mostrado disposición a negociar para formar un gobierno estable. Egede, del IA, reconoció el resultado en redes sociales y aseguró que su partido está listo para participar en las conversaciones:

«Respetamos el resultado de las elecciones. Ahora empieza el trabajo en un nuevo período», escribió.

La fragmentación del Parlamento sugiere que será necesario formar una coalición amplia. El Demokraatit, como ganador, tendrá la primera oportunidad de liderar las negociaciones, aunque el escenario sigue siendo incierto debido a las diferencias ideológicas entre los partidos.


Conclusión: Un Futuro Incierto pero Prometedor

El triunfo del Demokraatit supone un giro inesperado en la política groenlandesa, rompiendo décadas de hegemonía del Siumut y el IA. Este resultado refleja un deseo de cambio y una búsqueda de nuevas soluciones a los problemas estructurales de la isla.

Aunque la mayoría de los partidos comparten la aspiración a largo plazo de lograr la independencia total de Dinamarca, existen profundas diferencias sobre cómo y cuándo alcanzar ese objetivo. Mientras tanto, el interés internacional en Groenlandia, particularmente de Estados Unidos y China, seguirá influyendo en las decisiones políticas y económicas.

Groenlandia entra en una nueva era política, donde la unidad y el pragmatismo serán claves para construir un futuro sostenible y soberano.

«Este es un momento crucial para Groenlandia. Debemos trabajar juntos para garantizar que nuestras decisiones nos acerquen a la prosperidad y no a la división», concluyó Nielsen tras su victoria histórica.

Publicidad