LONDRES, 3 de marzo.- Las declaraciones del presidente francés, Emmanuel Macron, sobre una posible tregua de un mes en Ucrania no han sido respaldadas por el gobierno británico, según afirmó este lunes el secretario de Estado británico para las Fuerzas Armadas, Luke Pollard. Aunque ambos países han estado trabajando conjuntamente en iniciativas para abordar la guerra, no existe un acuerdo formal sobre cómo implementar esta propuesta.


Macron Plantea una Tregua Temporal

El domingo, Macron declaró al diario francés Le Figaro que Francia y Reino Unido estaban proponiendo una tregua de un mes en Ucrania, específicamente “en los aires, en los mares y en las infraestructuras energéticas”. Esta declaración se produjo poco antes de una cumbre de líderes europeos en apoyo a Kiev, celebrada en Londres y presidida por el primer ministro británico, Keir Starmer.

Sin embargo, funcionarios británicos negaron que existiera un consenso sobre esta iniciativa. Según Pollard, quien habló en la radio Times, “no hay acuerdo sobre cómo sería una tregua (…) pero estamos trabajando juntos, con Francia y nuestros aliados europeos, para determinar el camino a seguir para una paz duradera en Ucrania”.

Un portavoz del gobierno británico reiteró esta postura, señalando bajo condición de anonimato:

“Hay varias opciones sobre la mesa, sujetas a mayores discusiones con Estados Unidos y los socios europeos, pero no se ha acordado una tregua de un mes”.


La Postura Británica: Enfoque en la Soberanía y Seguridad de Ucrania

Durante la cumbre en Lancaster House, Starmer destacó la necesidad de avanzar con impulso en las conversaciones de paz, enfatizando que cualquier solución debe garantizar la soberanía y seguridad de Ucrania. El primer ministro británico exhortó a los líderes europeos a asumir su parte de la responsabilidad en el apoyo a Kiev, tanto militar como económico.

Starmer subrayó cuatro puntos clave acordados por los líderes presentes:

  1. Mantener el flujo de ayuda a Ucrania: Garantizar que Kiev reciba el apoyo necesario para resistir la agresión rusa.
  2. Presión económica sobre Rusia: Fortalecer las sanciones para debilitar la capacidad de Moscú de continuar la guerra.
  3. Incluir a Ucrania en las negociaciones de paz: Asegurar que cualquier acuerdo futuro respete la soberanía y seguridad del país.
  4. Continuar armando a Ucrania: Reforzar la capacidad defensiva de Kiev para disuadir futuras invasiones.

Estas medidas reflejan la postura británica de priorizar la fortaleza de Ucrania antes de considerar cualquier tipo de acuerdo temporal con Rusia.


Tensiones con Washington y el Papel de Trump

La reunión en Londres también se vio ensombrecida por las recientes declaraciones del presidente estadounidense, Donald Trump, quien criticó al presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, acusándolo de no mostrar suficiente gratitud por el apoyo de Estados Unidos. Este comentario generó preocupación sobre el futuro del respaldo estadounidense a Ucrania, especialmente en momentos críticos para la guerra.

Starmer intentó aprovechar la cumbre para tender un puente entre Europa y Estados Unidos, buscando mantener cohesionado el frente occidental en apoyo a Ucrania. Sin embargo, las tensiones internacionales resaltan la complejidad de coordinar esfuerzos diplomáticos mientras se gestiona la presión de actores como Rusia y figuras políticas impredecibles como Trump.


Francia y Reino Unido: Colaboración con Diferencias

Aunque París y Londres coinciden en la necesidad de buscar una solución al conflicto, sus enfoques difieren en algunos aspectos clave. Mientras Macron parece inclinarse hacia medidas temporales como una tregua limitada, el gobierno británico insiste en un enfoque más estratégico y a largo plazo que asegure la integridad territorial de Ucrania.

Esta divergencia refleja las diferentes perspectivas dentro de Europa sobre cómo manejar el conflicto. Francia tiende a adoptar un tono más conciliador, mientras que el Reino Unido se mantiene firme en su postura de apoyo militar continuo a Ucrania.


Un Proceso de Paz Complejo

La falta de acuerdo sobre la propuesta de tregua de un mes subraya la dificultad de alcanzar un consenso internacional en un conflicto tan polarizado. Mientras Francia busca explorar opciones temporales para reducir la intensidad de los combates, el Reino Unido insiste en garantizar que cualquier avance diplomático sea sostenible y beneficie directamente a Ucrania.

La cumbre en Londres marcó un paso importante en las conversaciones, pero también dejó claro que aún queda mucho trabajo por hacer para alinear a los aliados occidentales en torno a una estrategia común. Con la sombra de Trump y la agresividad de Rusia en el horizonte, el camino hacia la paz sigue siendo incierto y lleno de desafíos.

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