Juneau, Alaska, EE.UU., 8 de febrero de 2024 – Un trágico accidente aéreo ocurrido en el oeste de Alaska ha dejado diez personas muertas, marcando uno de los peores desastres de aviación en el estado en los últimos 25 años . Las autoridades trabajan contrarreloj para recuperar los restos del avión y las víctimas antes de la llegada de fuertes vientos y nevadas que podrían complicar aún más las operaciones de rescate.
El Siniestro en el Hielo Marino
El avión turbohélice monomotor Cessna Caravan , operado por Bering Air , realizaba un vuelo regular desde Unalakleet hacia el centro comunitario de Nome cuando desapareció el jueves por la tarde. Tras una extensa búsqueda, los restos de la aeronave fueron localizados el viernes sobre el inestable hielo marino, aproximadamente a 48 kilómetros (30 millas) al sureste de Nome. Lamentablemente, los nueve pasajeros y el piloto fallecieron en el siniestro.
Las condiciones climáticas en la zona son extremadamente adversas, con temperaturas bajo cero y un terreno resbaladizo y frágil. Según Jim West , jefe del Departamento de Bomberos Voluntarios de Nome, “las condiciones allí son dinámicas, así que tenemos que actuar de manera segura y lo más rápido posible”. Los equipos de rescate están empleando helicópteros y personal especializado para retirar los cuerpos y asegurar los restos del avión antes de que empeoren las condiciones meteorológicas.
Víctimas y Legado
Entre los fallecidos se encuentran Rhone Baumgartner y Kameron Hartvigson , dos técnicos que habían viajado a Unalakleet para reparar un sistema de recuperación de calor esencial para la planta de agua de la comunidad. Su labor era crucial para garantizar el suministro de agua potable en esta región remota.
“Estos dos miembros de nuestro equipo perdieron sus vidas sirviendo a otros”, declaró David Beveridge , vicepresidente de salud ambiental e ingeniería del Consorcio de Salud Tribal Nativo de Alaska. “La pérdida de estas dos increíbles personas y todos los demás a bordo del avión se sentirá en toda Alaska”.
Los nombres de las demás víctimas no han sido revelados aún, pero se sabe que todas eran adultos. El vuelo formaba parte de una ruta programada regularmente, utilizada por residentes locales para conectar comunidades aisladas.
Condiciones del Vuelo y Posibles Causas
El avión despegó de Unalakleet a las 14:37 horas del jueves bajo condiciones climáticas difíciles: nieve ligera, niebla y una temperatura de -8,3°C (17°F) . Menos de una hora después, se perdió contacto con la aeronave. Datos forenses de radar indican que el avión experimentó una rápida pérdida de altitud y velocidad alrededor de las 15:18 horas , según explicó el teniente comandante de la Guardia Costera, Benjamin McIntyre-Coble .
Aunque los detalles exactos del accidente aún están bajo investigación, no se recibió ninguna señal de socorro del transmisor de localización de emergencia del avión, un dispositivo diseñado para activarse automáticamente al entrar en contacto con agua.
Respuesta Comunitaria y Operativo de Rescate
La búsqueda del avión fue liderada por agencias locales, estatales y federales, incluyendo la Guardia Costera de EE.UU. , que desplegó helicópteros y nadadores de rescate para investigar los restos. Una fotografía distribuida por la Guardia Costera muestra el fuselaje astillado del avión y escombros dispersos sobre el hielo marino, rodeados por rescatistas con trajes de emergencia de colores brillantes.
El alcalde de Nome, John Handeland , expresó su dolor y solidaridad con las familias afectadas: “Nome es una comunidad fuerte, y en tiempos difíciles nos unimos y nos apoyamos mutuamente. Espero que el apoyo continúe en los próximos días mientras trabajamos para recuperarnos de este trágico incidente”.
Un Recordatorio de la Importancia de la Aviación en Alaska
En Alaska, volar es más que un medio de transporte: es una necesidad vital debido a la vasta geografía y la falta de infraestructura carretera en muchas comunidades rurales. Sin embargo, esta dependencia también expone a los residentes a riesgos inherentes, especialmente en condiciones climáticas extremas.
Este accidente marca el tercer gran percance aéreo en Estados Unidos en menos de una semana, después del choque entre un avión comercial y un helicóptero militar cerca de Washington, D.C., que dejó 67 muertos , y el estrellamiento de un avión de transporte médico en Filadelfia, con siete víctimas mortales .
¿Qué Sigue Ahora?
La Junta Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB) enviará a nueve funcionarios al lugar del accidente para investigar las causas del siniestro. Mientras tanto, las comunidades afectadas enfrentan una difícil recuperación emocional y logística tras esta tragedia.