Tegucigalpa, 16 nov (EFE).- La tormenta tropical Sara, que desde el jueves azota con fuerza el Caribe hondureño, ha dejado hasta ahora un saldo de al menos una persona fallecida, más de 47.000 afectadas y 143 comunidades incomunicadas, según informaron este sábado las autoridades de protección civil.
La Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco) confirmó que una persona murió por sumersión en el departamento de Yoro, al norte del país. Además, se reportan 778 familias damnificadas, 107 evacuadas y 507 albergadas en distintos centros temporales.
José Jorge Fortín, titular de Copeco, advirtió que las condiciones adversas persistirán: “El sistema mantendrá lluvias intensas, oleaje alterado y vientos racheados durante las próximas 36 horas”.
Los departamentos más afectados son Gracias a Dios, Colón, Atlántida y Yoro, donde las lluvias han provocado graves inundaciones y el aislamiento de comunidades enteras.
El meteorólogo Víctor Ortega informó que la tormenta ha estado estacionaria durante las últimas nueve horas, pero se espera que avance hacia el noroeste durante el día, acercándose a Belice. Mientras tanto, las precipitaciones seguirán afectando principalmente a Atlántida, Islas de la Bahía, Cortés y Santa Bárbara.
Los ríos Ulúa y Chamelecón, que nacen en el occidente y desembocan en el Caribe, están aumentando su nivel de manera preocupante, lo que podría generar desbordamientos en zonas urbanas y rurales.
Ante el riesgo, Copeco mantiene en alerta roja a cinco departamentos, mientras que otros tres están en alerta amarilla y diez más en verde.
El impacto de Sara trae recuerdos de las tormentas Eta e Iota en 2020, que dejaron un centenar de muertos, millonarias pérdidas materiales y 3,4 millones de afectados en Honduras, un país con aproximadamente 10 millones de habitantes.