Latinoamérica reacciona ante el aniversario del ataque de Hamás y la ofensiva de Israel en Gaza

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Redacción América, 8 de octubre.- Un año después del ataque terrorista de Hamás en Israel, que resultó en la muerte de 1.200 personas, el secuestro de 251 y el inicio de una ofensiva militar por parte del Estado de Israel, diversos países de Latinoamérica, tanto a nivel gubernamental como ciudadano, se han manifestado exigiendo un cese al fuego inmediato en Gaza y condenando las acciones que han desencadenado un nuevo ciclo de violencia en Oriente Medio.

La ofensiva militar israelí, bajo el mandato del primer ministro Benjamín Netanyahu, ha dejado hasta el momento un saldo devastador de más de 41.900 palestinos muertos, incluidos alrededor de 17.000 niños, y 97.303 heridos, según cifras del Ministerio de Sanidad de Gaza.

En Buenos Aires, la comunidad judía argentina llevó a cabo una masiva concentración en el barrio de Villa Crespo, donde reclamaron la liberación de los 101 rehenes que aún permanecen cautivos en la Franja de Gaza. Entre ellos, nueve son ciudadanos argentinos, según fuentes locales. El presidente argentino, Javier Milei, también se sumó a la demanda y expresó en la red social X que “nuestro corazón está cautivo en Gaza”.

Paralelamente, grupos solidarios con el pueblo palestino se reunieron en la Plaza de Mayo, frente a la sede del Ejecutivo argentino, para exigir el fin de lo que calificaron como una “masacre” en Palestina y otros países como Líbano, Yemen y Siria, bajo el lema ‘Basta del genocidio’.

En Brasil, la comunidad judía conmemoró el aniversario del ataque de Hamás en medio de fuertes críticas hacia la política exterior del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien ha expresado su oposición a la ofensiva israelí. En São Paulo, que alberga a la mayor comunidad judía del país, unas 120.000 personas, los manifestantes expresaron su “apoyo incondicional” a Israel. Rafael Erdreich, cónsul general de Israel en la ciudad, afirmó: “El pueblo judío está unido contra el terrorismo y el antisemitismo”.

El Gobierno brasileño, por su parte, lamentó la pérdida de miles de vidas, “en su mayoría civiles”, y recordó a los ciudadanos brasileños Michel Nisembaum, secuestrado en Gaza, y a Karla Stelzer Mendes, Bruna Valeanu y Ranani Nidejelski Glazer, asesinados por Hamás el 7 de octubre de 2023.

En Bolivia, decenas de estudiantes universitarios protestaron en La Paz contra lo que denominaron un “genocidio” perpetrado por Israel. Con consignas como “¡Qué viva la resistencia Palestina!” y “Hay que parar el genocidio de Israel y EE.UU.”, los manifestantes condenaron las acciones militares israelíes.

En Venezuela, el gobierno de Nicolás Maduro activó un centro de acopio en Caracas para recolectar ayuda humanitaria destinada a Palestina y otros países de Oriente Medio. Maduro reafirmó su “solidaridad absoluta” con Palestina y criticó duramente a las instituciones internacionales, señalando que la ONU está “bajo los escombros” tras un año de “la guerra de exterminio más horrorosa que se haya conocido desde la época” de Adolf Hitler.

Cuba también condenó lo que llamó el “exterminio israelí” y las “masacres en Gaza”. Bruno Rodríguez, ministro de Relaciones Exteriores cubano, señaló que Israel ahora expande sus ataques al Líbano con el “apoyo” y “complicidad” de Estados Unidos.

En Colombia, centenares de manifestantes marcharon por Bogotá para exigir una “Palestina libre” y condenar lo que consideran un “genocidio” por parte de Israel. El gobierno colombiano, a través del canciller Luis Gilberto Murillo, reiteró su llamado a un cese al fuego en Gaza y pidió la liberación de los rehenes, la entrada de ayuda humanitaria, y una solución política basada en la coexistencia de dos estados.

Uruguay también se sumó a las voces que piden la reanudación de la vía diplomática. En un comunicado emitido por su Ministerio de Relaciones Exteriores, el gobierno uruguayo instó a un desescalamiento del conflicto y reafirmó su compromiso con una resolución pacífica y duradera en Oriente Medio.

El panorama en Latinoamérica refleja la diversidad de opiniones sobre un conflicto que, un año después del ataque de Hamás, sigue cobrando vidas y generando tensiones a nivel global.

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