Ciudad de México, 12 julio.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, rechazó este viernes las acusaciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), calificándolo de “mentiroso y corrupto”. El TEPJF había acusado al mandatario de comprometer la imparcialidad, la neutralidad y la equidad durante la elección del 2 de junio, influenciando indebidamente el resultado a favor de Claudia Sheinbaum, la presidenta electa.
En su conferencia matutina, López Obrador desafió las afirmaciones del TEPJF que indicaban que utilizó indebidamente recursos públicos y coaccionó el voto ciudadano a través de sus ‘mañaneras’ en mayo de 2023. Según el tribunal, dichas acciones constituían una promoción personalizada y difusión de propaganda gubernamental en periodo prohibido.
Sheinbaum, quien también fue señalada por el tribunal por hacer declaraciones durante una conferencia de prensa cuando era jefa de Gobierno de la Ciudad de México, ganó la presidencia con el 59,75 % de los votos. Mientras López Obrador, como presidente, está exento de sanciones por infracciones electorales, Sheinbaum podría enfrentar sanciones pendientes de determinación por el Congreso de la capital.
El mandatario negó las acusaciones de violencia política de género y simbólica contra su contrincante opositora, Xóchitl Gálvez, desafiando a los periodistas a verificar el contenido de sus conferencias para encontrar pruebas de su supuesto partidismo.
López Obrador finalizó su mandato criticando a la prensa, especialmente a la periodista Anabel Hernández, quien según él, le atribuyó falsamente vínculos con el narcotráfico. Su periodo como presidente terminará el 1 de octubre próximo.