Toronto, Canadá, 13 Oct.- — Con la temporada de Acción de Gracias a la vuelta de la esquina, expertos culinarios y de salud en Canadá están alertando sobre los riesgos asociados a las ollas y sartenes antiadherentes, un utensilio común en muchas cocinas. Los especialistas destacan que, aunque son convenientes, estas herramientas pueden contener sustancias químicas permanentes conocidas como PFAS, que no se degradan naturalmente y representan riesgos tanto para la salud como para el medio ambiente.
PFAS y sus riesgos para la salud
Los PFAS —perfluoroalquilo y polifluoroalquilo— se encuentran en sartenes antiadherentes, cosméticos, envases de comida, dispositivos médicos y tejidos resistentes a manchas, entre otros. Según Salud Canadá, la exposición a estas sustancias puede afectar el hígado, el sistema inmunológico, reproductivo y nervioso, así como los riñones, la tiroides y el metabolismo.
Estas sustancias se han acumulado en ecosistemas y poblaciones del Norte de Canadá, generando preocupación sobre su persistencia en el medio ambiente y su potencial vínculo con enfermedades crónicas, incluido el cáncer. Por ello, legislaciones como la de California han avanzado con prohibiciones sobre utensilios de cocina que contengan PFAS, mientras que otras jurisdicciones, como Columbia Británica, observan atentamente estas medidas para decidir sus propios pasos regulatorios.
Alternativas a las sartenes antiadherentes
Expertos como Julia House, propietaria de una tienda de utensilios en Nanaimo (BC), y David Lang, director del programa de artes culinarias de Camosun College, coinciden en que existen alternativas seguras y duraderas. Entre ellas destacan:
- Sartenes de acero al carbono: duraderas y con capacidad para volverse naturalmente antiadherentes mediante sazonado.
- Sartenes de hierro fundido: requieren mantenimiento adecuado, pero pueden durar toda la vida y ofrecer un rendimiento superior.
- Sartenes de acero inoxidable y acero francés: resistentes y con la técnica correcta, pueden replicar las ventajas de las sartenes antiadherentes.
Lang enfatiza que la técnica culinaria es clave. Calentar correctamente la sartén, añadir grasa antes de cocinar y conocer el comportamiento de cada tipo de material puede generar un efecto antiadherente igual o superior al de las sartenes tradicionales recubiertas con PFAS.
Mantenimiento y durabilidad
El cuidado adecuado prolonga la vida útil de estas alternativas:
- Secar bien las sartenes de acero al carbono o hierro fundido para evitar oxidación.
- Lavar con cuidado y re-sazonar después de cada uso según sea necesario.
- Aprender a familiarizarse con la sartén y la estufa permite un uso óptimo en pocos días.
House y Lang coinciden en que invertir en sartenes de calidad y duraderas no solo es más seguro para la salud, sino también más económico a largo plazo, al reducir la necesidad de reemplazos frecuentes.
En conclusión, mientras muchos canadienses preparan sus cenas de Acción de Gracias, los expertos recomiendan evaluar alternativas más seguras y sostenibles a las ollas y sartenes antiadherentes, enfocándose en utensilios de acero al carbono, hierro fundido o acero inoxidable y en la técnica adecuada de cocina, para cocinar de manera más saludable y responsable con el medio ambiente.








