DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos, 27 de abril.- El número de muertos por la explosión en el puerto Shahid Rajaei, cerca de Bandar Abbas, al sur de Irán, aumentó a 40 personas, según informaron autoridades el domingo. Además, más de 1.000 personas resultaron heridas en el incidente ocurrido el sábado, lo que ha generado preocupación tanto local como internacional sobre las causas del desastre.

La televisión estatal iraní citó al gobernador provincial Mohammad Ashouri, quien confirmó la cifra actualizada de víctimas. La explosión tuvo lugar en una instalación vinculada, según informes no oficiales, a la entrega de un ingrediente químico utilizado para fabricar propulsor sólido de misiles. Sin embargo, las autoridades militares han negado estas afirmaciones, sin proporcionar una explicación clara sobre qué material detonó con tal fuerza.


Una Escena Apocalíptica y Daños Masivos

El puerto, uno de los principales de Irán, fue devastado por la explosión. Videos difundidos en redes sociales mostraron una escena catastrófica: un cráter profundo rodeado por columnas de humo ardiente, contenedores destrozados esparcidos como si fueran juguetes, y vehículos quemados desperdigados por el área. Las autoridades cerraron escuelas, negocios y carreteras cercanas debido a la peligrosidad del humo residual.

El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, visitó a los heridos y reconoció la gravedad del incidente. “Tenemos que averiguar por qué ocurrió”, declaró durante una reunión con funcionarios transmitida por la televisión estatal. Aunque las autoridades aseguran que el incendio está bajo control, trabajadores de emergencia continuaron arrojando agua de mar desde helicópteros y aviones de carga pesada para sofocar completamente el fuego.


Posible Vinculación con Material Militar

La firma de seguridad privada Ambrey señaló que el puerto recibió un envío de perclorato de amonio, un compuesto químico utilizado para fabricar propulsor sólido de misiles, en marzo. Este material formaba parte de un cargamento procedente de China reportado inicialmente por el Financial Times en enero. Según Ambrey, el químico estaba destinado a reponer las reservas de misiles de Irán, que se habían agotado tras sus ataques contra Israel durante la guerra en la Franja de Gaza.

Datos de seguimiento de barcos analizados por The Associated Press confirmaron la presencia de uno de los buques involucrados en el envío cerca del puerto en marzo. Ambrey sugirió que la explosión pudo haber sido causada por un manejo inadecuado del material, aunque esta hipótesis aún no ha sido confirmada oficialmente.


Negación Oficial y Ausencia de Explicaciones

El portavoz del Ministerio de Defensa iraní, el general Reza Talaeinik, negó categóricamente que se hubiera importado combustible para misiles a través del puerto. “Ningún tipo de envío importado o exportado para combustible o aplicación militar estaba (o) está en el sitio del puerto”, declaró a la televisión estatal. Sin embargo, Talaeinik no ofreció una explicación alternativa sobre qué provocó la explosión ni qué material detonó con tal magnitud.

La negativa oficial contrasta con informes extranjeros y análisis independientes que señalan la posible presencia de materiales químicos peligrosos en el puerto. Imágenes compartidas en redes sociales mostraron una columna de humo de tono rojizo elevándose justo antes de la detonación, lo que sugiere la participación de un compuesto químico específico, similar a lo observado en la explosión del puerto de Beirut en 2020.


Paralelismos con la Tragedia de Beirut

La explosión en el puerto de Shahid Rajaei evoca recuerdos dolorosos de la tragedia de Beirut, donde cientos de toneladas de nitrato de amonio almacenado de manera insegura causaron la muerte de más de 200 personas y dejaron miles de heridos. Esto plantea preguntas sobre por qué Irán no retiró los materiales peligrosos del puerto, especialmente después de las lecciones aprendidas de Beirut.

Sin embargo, algunos analistas especulan que Irán podría haber carecido de capacidad para procesar el perclorato de amonio debido a los repetidos ataques israelíes contra sus instalaciones de producción de combustible sólido. Esto podría haber llevado a un almacenamiento prolongado en el puerto, aumentando el riesgo de accidentes.


Luto y Preocupación Internacional

El gobernador provincial declaró tres días de luto en la región, mientras que la comunidad internacional sigue de cerca el desarrollo de los acontecimientos. Hasta ahora, ningún país ha emitido un comunicado oficial sobre la explosión, pero las sospechas sobre el posible uso militar del material involucrado podrían intensificar tensiones regionales, especialmente entre Irán e Israel.

Mientras tanto, organizaciones humanitarias locales, incluida la Media Luna Roja de Irán, continúan brindando asistencia médica a los afectados. Según su director, Pir Hossein Kolivand, solo 190 de los heridos permanecían hospitalizados el domingo, lo que indica que muchos de los lesionados sufrieron heridas leves.


Conclusión: Un Misterio Sin Resolver

Aunque las autoridades iraníes han prometido investigar y proporcionar más información, las contradicciones en las declaraciones oficiales y la falta de transparencia alimentan la incertidumbre. La explosión en el puerto Shahid Rajaei deja un saldo trágico de muertos y heridos, así como graves daños materiales, mientras las preguntas sobre su causa real siguen sin respuesta.

El incidente también resalta la necesidad de mejores prácticas de seguridad en la manipulación y almacenamiento de materiales peligrosos, especialmente en instalaciones clave como puertos comerciales y militares.

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