Ciudad de México, 13 de noviembre de 2024 – Médicos Sin Fronteras (MSF) expresó este miércoles su creciente preocupación por el aumento “drástico” de las caravanas migrantes que han llegado a México desde su frontera sur. La organización humanitaria señala que los migrantes, en su mayoría provenientes de Centroamérica y otros países, están formando cada vez más grupos masivos como mecanismo de protección ante la violencia que enfrentan durante su trayecto.
Según MSF, las caravanas, que antes eran de cientos de personas, ahora superan los miles. Entre el 24 de septiembre y el 8 de noviembre, la organización brindó asistencia médica a unas 5.000 personas de ocho caravanas que partieron principalmente de Tapachula, Chiapas, en su camino hacia Estados Unidos. La violencia a la que se enfrentan los migrantes en México, que incluye secuestros, extorsiones y violencia sexual, ha obligado a muchos a desplazarse en estas grandes agrupaciones para protegerse mutuamente.
Ricardo Santiago, coordinador de proyectos de MSF en el sur de México, comentó que, aunque las caravanas han aumentado en tamaño, los migrantes también enfrentan otras dificultades que impulsan su agrupación, como la saturación de los servicios para solicitar asilo y la demora en las respuestas de las autoridades. Además, las largas caminatas a través de México, sumadas a las altas temperaturas y el consumo de agua no potable, han provocado diversas enfermedades, como afecciones respiratorias, gastrointestinales y musculoesqueléticas.
MSF destacó que las condiciones de vida de los migrantes también están teniendo un fuerte impacto psicológico. Daniel Bruce, coordinador para proyectos en Tapachula, subrayó que, además de los efectos de la violencia, es urgente ofrecer vías de migración seguras y reforzar los servicios básicos de atención a esta población vulnerable.