Buenos Aires, 21 oct.- El expresidente de Perú, Alejandro Toledo, fue condenado a 20 años y 6 meses de prisión por su implicación en uno de los mayores escándalos de corrupción de América Latina, relacionado con la constructora brasileña Odebrecht. Toledo fue encontrado culpable de colusión y lavado de activos tras recibir al menos 35 millones de dólares en sobornos para favorecer a Odebrecht en la licitación de la carretera Interoceánica, que conecta Perú y Brasil.
La Fiscalía, encabezada por el fiscal anticorrupción José Domingo Pérez, presentó pruebas que confirmaban el pago de sobornos canalizados a través de Josef Maiman, un empresario israelí cercano a Toledo, con el objetivo de garantizar la adjudicación del proyecto vial. Durante el juicio, Toledo admitió que Maiman pagó dos cuotas de su casa en Lima, pero negó conocer el origen de esos fondos y rechazó haber tenido acuerdos con Odebrecht.
La carretera Interoceánica, finalizada en 2013, tiene una extensión de 2,600 kilómetros y fue vista como un proyecto clave para el desarrollo de infraestructura en Perú. Sin embargo, la obra quedó manchada por las denuncias de corrupción que involucraron a varios expresidentes peruanos, incluidos Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski, así como a Alan García, quien se quitó la vida en 2019 en medio de las investigaciones.
Durante el juicio, Toledo mantuvo su inocencia y afirmó que no había hecho ningún pacto con Jorge Barata, exdirectivo de Odebrecht, ni con Maiman. Pese a su defensa, el tribunal dictó una sentencia contundente, condenándolo a prisión y a tres años de inhabilitación para ocupar cargos públicos, además de imponerle una multa.
Toledo, de 77 años, pidió a los jueces ser autorizado a cumplir la pena en arresto domiciliario debido a su delicado estado de salud, ya que padece cáncer y afecciones cardíacas. “Soy inocente. Nunca hice ningún arreglo con Odebrecht ni con Maiman”, insistió el exmandatario, quien fue extraditado desde Estados Unidos en abril de 2023 para enfrentar este juicio.
El caso Interoceánica no es el único proceso judicial contra Toledo. Un día antes de su sentencia, EE.UU. aprobó una ampliación de su extradición por el caso Ecoteva, relacionado con la compra de bienes en Perú a través de fondos de Odebrecht transferidos a una empresa en Costa Rica. Este proceso también involucra a la exprimera dama, Eliane Karp, quien actualmente reside en Israel.
Este veredicto se suma a una lista de expresidentes peruanos procesados por corrupción, reflejando la profunda crisis política y moral que ha afectado al país durante las últimas décadas.