LONDRES, 4 de mayo.- A los 115 años, Ethel Caterham ha sido reconocida como la persona viva más longeva del mundo por el Gerontology Research Group (GRG), un grupo sin fines de lucro dedicado a investigar a los supercentenarios (personas mayores de 110 años). Su título llegó tras el fallecimiento de la monja brasileña Inah Canabarro, quien tenía 116 años.
Desde su residencia en una casa de ancianos en Surrey, al suroeste de Londres, Caterham compartió su sencillo secreto para alcanzar una vida tan larga: “Nunca discuto con nadie, escucho y hago lo que me gusta”.
Una Vida Marcada por la Historia
Nacida el 21 de agosto de 1909 en el pequeño pueblo de Shipton Bellinger, en el sur de Inglaterra, Ethel vivió un siglo marcado por eventos históricos globales. Era la segunda más joven de ocho hermanos y creció cinco años antes del estallido de la Primera Guerra Mundial. Durante su juventud, mostró un espíritu aventurero que la llevó a viajar por el mundo.
En 1927, a los 18 años, Caterham viajó a la entonces colonia británica de India, donde trabajó como niñera para una familia británica. Pasó tres años en el país antes de regresar a Inglaterra, según información del GRG.
Un Viaje por el Mundo y una Familia Amorosa
El destino le sonrió nuevamente en 1931, cuando conoció a Norman Caterham, un oficial del ejército británico, durante una cena. La pareja se casó poco después y vivió en lugares tan diversos como Hong Kong y Gibraltar, donde Norman estaba destinado. Juntos tuvieron dos hijas, quienes fueron criadas en el Reino Unido. Norman falleció en 1976, dejando a Ethel viuda, pero ella continuó adelante con su vida, demostrando una notable fortaleza emocional.
Celebración de un Hito Extraordinario
La residencia de Ethel, Hallmark Lakeview Luxury Care Home en Camberley, celebró su logro compartiendo fotos en redes sociales. En las imágenes, se ve a Caterham sonriendo mientras parte un pastel decorado con el número “115” y luce una tiara que simboliza su nuevo título.
En un comunicado publicado en Facebook, la residencia destacó:
“¡Enormes felicitaciones a Ethel, residente de Lakeview, por convertirse en la persona más longeva del mundo! Qué hito increíble y un verdadero testimonio de una vida bien vivida. Tu fortaleza, espíritu y sabiduría son una inspiración para todos nosotros. ¡Brindemos para celebrar tu extraordinario recorrido!”
El Legado de Jeanne Calment
Aunque Ethel es ahora la persona viva más longeva del mundo, el récord absoluto de longevidad sigue perteneciendo a la francesa Jeanne Calment, quien vivió hasta los 122 años y 164 días, según el Guinness World Records. Calment, quien falleció en 1997, es considerada un símbolo de resistencia y vitalidad.
El Secreto de una Vida Plena
Más allá de sus genes, Ethel atribuye su longevidad a una filosofía simple pero poderosa: evitar conflictos y hacer lo que disfruta. Esta mentalidad positiva y pacífica parece haber sido clave en su capacidad para navegar por más de un siglo de cambios, desafíos y alegrías.
Su historia no solo es un testimonio de longevidad física, sino también de cómo llevar una vida plena y significativa. Desde su infancia en un pequeño pueblo inglés hasta sus aventuras en India y su matrimonio con un soldado británico, Ethel ha vivido una vida rica en experiencias y relaciones humanas.
Conclusión: Una Inspiración para Todos
Ethel Caterham representa algo más que un récord mundial; es un recordatorio de que una vida larga y feliz depende tanto de nuestras elecciones diarias como de nuestra genética. Al evitar discusiones innecesarias y enfocarse en lo que realmente importa, Ethel ha demostrado que la clave para una vida plena radica en la paz interior y la gratitud.
“Tu fortaleza, espíritu y sabiduría son una inspiración para todos nosotros”, escribió su residencia. Y, sin duda, Ethel seguirá siendo un ejemplo a seguir para generaciones futuras.
¡Felicitaciones, Ethel, por este increíble logro y por compartir tu sabiduría con el mundo!