TORONTO, 10 de abril — Un número creciente de canadienses está reconsiderando sus viajes a Estados Unidos debido al endurecimiento de las medidas de seguridad fronteriza bajo la administración de Donald Trump. Desde académicos hasta artistas y miembros de comunidades marginadas, muchos expresan temor ante la posibilidad de ser detenidos, interrogados o sometidos a revisiones invasivas en la frontera.
El Caso del Profesor Arash Abizadeh: Renuncia a Viajar por Incertidumbre
El profesor de ciencias políticas Arash Abizadeh, de la Universidad McGill en Montreal, es uno de los muchos canadienses que han cancelado sus planes de visitar Estados Unidos. Originalmente invitado a una conferencia académica en Durham, Carolina del Norte, Abizadeh decidió no asistir tras enterarse de casos recientes de extranjeros detenidos en la frontera estadounidense.
“¿Por qué nos someteríamos a esto?”, se preguntó Abizadeh. Aunque él no ha cometido ningún delito, reconoce que el escrutinio actual plantea dudas incómodas: “¿He dicho algo en redes sociales que el régimen actual pueda considerar crítico?”.
Este sentimiento refleja una preocupación compartida por muchos canadienses, especialmente aquellos que han sido críticos abiertos de las políticas de Trump o pertenecen a comunidades históricamente marginadas.
Caída Significativa en los Viajes
Las cifras respaldan esta tendencia. Según datos recientes, los viajes de regreso entre canadienses que visitaron Estados Unidos en marzo cayeron drásticamente en comparación con el año anterior:
- Viajes aéreos: Disminución del 13,5 %.
- Viajes por tierra: Caída del 32 %.
Dos factores principales explican esta disminución:
- Políticas comerciales de Trump: La guerra comercial y los aranceles impuestos por EE.UU. han generado indignación entre los canadienses.
- Mayor control fronterizo: La promesa de Trump de tomar medidas drásticas contra la inmigración ha llevado a un aumento significativo en los controles y detenciones en la frontera.
Detenciones y Relatos Preocupantes
Casos recientes han exacerbado el temor entre los viajeros canadienses:
- Jasmine Mooney, una actriz canadiense, fue detenida durante 11 días tras intentar ingresar a Estados Unidos para renovar su visa de trabajo. En una entrevista con CBC News, describió su experiencia como traumática:
“Me metieron en una cárcel de verdad. Es como en las películas: dos niveles, celdas a cada lado. Para ser honesta, creo que no salí de mi celda en 24 horas. Estaba muy angustiada”.
Mooney relató cómo las autoridades fronterizas confiscaron sus dispositivos electrónicos y revisaron su historial en redes sociales. Su caso no es único: también se han reportado detenciones prolongadas de turistas alemanes, un mochilero galés y otros canadienses.
La Perspectiva Legal: Pérdida de Discreción
El abogado de inmigración estadounidense Len Saunders, quien asesoró a Mooney, señaló que estas detenciones representan un cambio radical en las políticas fronterizas. Bajo administraciones anteriores, los viajeros cuyas solicitudes no cumplían con los requisitos normalmente eran devueltos a su país de origen sin mayores complicaciones.
“Nunca los habrías visto bajo custodia, especialmente por más de un día”, dijo Saunders. “Parece que no hay discreción alguna. Es casi como si el péndulo hubiera dado un giro de 180 grados, de una aplicación mínima a una aplicación máxima.”
Impacto en Comunidades Específicas
Defensores de la DEI
La profesora de química Jennifer Love, de la Universidad de Calgary, canceló sus planes de hablar en una conferencia en Honolulu debido a su activismo en temas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI). Love, quien tiene doble nacionalidad canadiense y estadounidense, teme ser blanco de represalias por criticar públicamente a la administración Trump en redes sociales.
“No me sorprendería que a estas alturas hubiera algún perfil sobre mí”, comentó Love, quien señala que incluso los ciudadanos estadounidenses no están exentos de riesgos.
Comunidad Iraní-Canadiense
La comunidad iraní-canadiense también enfrenta desafíos particulares. Con las tensiones diplomáticas entre EE.UU. e Irán, muchos sienten que ya no son bienvenidos en territorio estadounidense.
Azin Mohager, gerente de Atlas Travel, una agencia de viajes con sede en Toronto que atiende principalmente a la comunidad iraní, informó que la mayoría de sus clientes han decidido evitar viajar a EE.UU. por miedo a ser interrogados o perseguidos.
“En algunos casos, incluso les han pedido que abran su teléfono y accedan a sus redes sociales”, dijo Mohager. “Solo por tu nombre o por tu lugar de nacimiento, tienes que pasar por esto.”
Actualización de Avisos de Viaje por Parte de Canadá
El gobierno canadiense ha actualizado recientemente sus avisos de viaje para EE.UU., recordando a los viajeros que pueden enfrentar “escrutinio” en la frontera, incluidas revisiones de teléfonos inteligentes. También advierte que aquellos a quienes se les niegue la entrada podrían ser detenidos temporalmente.
Conclusión: Una Frontera Más Hostil
El endurecimiento de las políticas fronterizas bajo la administración Trump ha generado incertidumbre y temor entre los canadienses, afectando tanto a viajeros ocasionales como a defensores de causas sociales y miembros de comunidades minoritarias. Si bien las autoridades estadounidenses aseguran que estas medidas buscan proteger la seguridad nacional, los relatos de detenciones prolongadas y revisiones invasivas han creado un clima de desconfianza que podría tener un impacto duradero en los viajes transfronterizos.
Mientras tanto, los canadienses se ven obligados a evaluar cuidadosamente los riesgos antes de cruzar la frontera, conscientes de que incluso un comentario en redes sociales o un apellido específico podría convertirse en un obstáculo imprevisto.