CARACAS, 16 feb.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, presentó este sábado ante la Asamblea Nacional su propuesta de reforma constitucional, que busca modificar la estructura del Estado mediante la incorporación de un nuevo nivel de poder territorial y establecer sanciones contra amenazas externas e internas. Durante una ceremonia oficial, el mandatario venezolano explicó que la iniciativa se compone de un cuerpo de 80 artículos divididos en cuatro ejes fundamentales.
Los Cuatro Ejes de la Reforma Constitucional
- Ampliación de la Democracia Participativa
Maduro destacó que uno de los objetivos principales de la reforma es fortalecer la democracia participativa mediante la incorporación del poder comunal, social y popular a los tres niveles de poder existentes: nacional, regional y municipal. Según el mandatario, esta medida busca profundizar la participación ciudadana y consolidar el modelo político impulsado por el fallecido expresidente Hugo Chávez. - Protección Contra Amenazas Fascistas
El segundo eje aborda la identificación y penalización de lo que Maduro denominó “amenazas fascistas”. El presidente afirmó que la nueva Constitución debe dejar claro que Venezuela no tolerará ninguna forma de fascismo, ya sea interno o externo, y que dichas acciones serán castigadas “de la manera más draconiana posible”. Maduro justificó esta propuesta señalando que Venezuela ha sido víctima de una “agresión multiforme” por parte de actores internacionales. - Diseño de un Modelo Económico Autosuficiente
En el tercer punto, Maduro planteó la creación de un nuevo modelo económico que rompa con la dependencia tradicional de las exportaciones petroleras y promueva la autosuficiencia económica. Este eje refleja la intención del gobierno de adaptarse a los cambios globales y reducir la vulnerabilidad del país frente a fluctuaciones en los precios del petróleo y sanciones internacionales. - Actualización del Engranaje Constitucional
Finalmente, el cuarto eje busca actualizar el marco jurídico y político del país “a la luz de los nuevos términos globales”. Aunque Maduro no entró en detalles sobre este aspecto, sugirió que la reforma incluiría ajustes para alinear la Carta Magna con los desafíos contemporáneos que enfrenta Venezuela.
Comisión Nacional Encargada de Elaborar la Reforma
Tras un discurso de más de dos horas, Maduro juramentó a una comisión nacional integrada por funcionarios cercanos a su gobierno para redactar el documento final de la reforma. Entre los miembros destacan:
- Tarek William Saab, fiscal general.
- Delcy Rodríguez, vicepresidenta.
- Cilia Flores, esposa del presidente y figura clave del oficialismo.
- Elvis Amoroso, presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE).
- Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional.
- Vladimir Padrino, ministro de Defensa.
La comisión tendrá 90 días para presentar las modificaciones constitucionales, que posteriormente deberán ser aprobadas mediante un referendo cuya fecha aún no ha sido definida.
Contexto Político y Tensión Internacional
La propuesta de reforma llega en un momento de alta polarización política en Venezuela. Maduro ejerce su tercer mandato consecutivo tras los controvertidos comicios del 28 de julio de 2024, en los que la oposición asegura que Edmundo González obtuvo una victoria aplastante según actas recopiladas el día de las elecciones. Sin embargo, el gobierno de Maduro declaró oficialmente su triunfo, desatando una crisis de legitimidad que ha sido reconocida por varios países y organismos internacionales.
González, reconocido como presidente electo por naciones como Estados Unidos, varios países latinoamericanos y europeos, permanece en el exilio en España, donde fue asilado en septiembre de 2024. Actualmente, realiza giras internacionales para acumular apoyo diplomático y presionar al gobierno de Maduro a iniciar una transición de poder, una posibilidad que el mandatario ha descartado públicamente.
Reacciones y Perspectivas
La reforma constitucional planteada por Maduro ha generado reacciones encontradas. Para el oficialismo, representa una oportunidad para consolidar el modelo político y económico del país bajo los principios del socialismo del siglo XXI. Sin embargo, sectores opositores y analistas critican la iniciativa, argumentando que podría profundizar la concentración de poder en manos del ejecutivo y limitar aún más las libertades democráticas.
Además, la propuesta de penalizar “amenazas fascistas” ha sido interpretada por algunos como un mecanismo para criminalizar la disidencia política y reprimir a quienes se opongan al gobierno. La comunidad internacional también observa con cautela este movimiento, especialmente en un contexto marcado por tensiones diplomáticas y sanciones económicas.
Un Legado Chavista Reinventado
La Constitución vigente en Venezuela, promulgada en 1999 bajo el liderazgo de Hugo Chávez, amplió los poderes del Estado, extendió el período presidencial a seis años y permitió la reelección indefinida. Ahora, Maduro busca reinventar ese legado mediante una reforma que adapte el marco jurídico a las realidades actuales del país.
Sin embargo, el éxito de esta iniciativa dependerá no solo de su aprobación en un referendo, sino también de la capacidad del gobierno de generar consenso entre los venezolanos en medio de una profunda crisis política, económica y social. Mientras tanto, la oposición sigue trabajando para mantener viva la esperanza de un cambio de régimen, confiando en el respaldo internacional y la movilización interna.
Conclusión: Un Futuro Incierto
La propuesta de reforma constitucional de Maduro refleja su intención de consolidar el control político y adaptar el sistema a los desafíos actuales. Sin embargo, en un contexto de polarización extrema y falta de confianza en las instituciones, la iniciativa podría enfrentar resistencia tanto dentro como fuera del país.
El futuro de Venezuela seguirá siendo objeto de debate mientras las tensiones internas y externas persistan. La pregunta clave es si esta reforma logrará unificar al país o profundizará aún más las divisiones que han marcado su historia reciente.