WASHINGTON, 10 ene.- Estados Unidos anunció este viernes un aumento de 15 a 25 millones de dólares en la recompensa por información que permita la captura de Nicolás Maduro, quien hoy asumió un nuevo mandato como presidente de Venezuela, en medio de acusaciones de fraude electoral y “golpe de Estado” por parte de la oposición.
El incremento de la recompensa es parte de una nueva serie de sanciones impuestas por la administración de Joe Biden tras la juramentación de Maduro, acto realizado ante la Asamblea Nacional controlada por el chavismo. La oposición reclama que el verdadero ganador de las elecciones fue Edmundo González Urrutia.
Recompensas y sanciones adicionales
Además de la recompensa por Maduro, Estados Unidos ofrece 25 millones de dólares por la captura del ministro del Interior, Diosdado Cabello, y 15 millones por el arresto del ministro de Defensa, Vladimir Padrino López.
El Departamento del Tesoro también impuso sanciones económicas contra ocho altos funcionarios venezolanos, entre ellos Héctor Obregón Pérez, presidente de la petrolera estatal PDVSA, y Ramón Celestino Velásquez, ministro de Transportes, acusados de participar en actos represivos y de corrupción.
TPS para venezolanos y medidas económicas
En una medida paralela, el gobierno de Biden anunció la extensión por 18 meses del Estatus de Protección Temporal (TPS) para miles de venezolanos en Estados Unidos, permitiéndoles residir y trabajar en el país.
Sin embargo, el paquete de sanciones no incluye la cancelación de licencias a empresas extranjeras como Chevron, que actualmente opera en Venezuela bajo permisos especiales para la extracción de petróleo.
Un alto funcionario de la administración explicó que estas sanciones buscan limitar los ingresos del régimen de Maduro, evaluando caso por caso la posibilidad de embargar activos venezolanos en el exterior.
Respuesta de Estados Unidos al contexto venezolano
El gobierno estadounidense calificó la juramentación de Maduro como una “farsa” y reiteró su respaldo a la oposición. Según fuentes oficiales, hay “pruebas indiscutibles” de que Edmundo González Urrutia ganó las elecciones presidenciales del 28 de julio, basándose en las actas electorales presentadas por la oposición.
Maduro, quien fue declarado vencedor por el Consejo Nacional Electoral controlado por el chavismo, ha enfrentado cuestionamientos internacionales debido a la falta de transparencia en el proceso electoral y la ausencia de resultados desagregados.
Con estas medidas, la administración Biden intensifica la presión sobre el régimen de Maduro, mientras se prepara para el relevo presidencial el 20 de enero, cuando Donald Trump asumirá nuevamente el poder.