JERUSALÉN, 7 Ene.- El Ministerio de Exteriores de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) ha condenado los recientes ataques perpetrados por colonos israelíes contra aldeas palestinas durante la noche, en represalia por la muerte de tres israelíes en un ataque palestino en el norte de Cisjordania ocupada. Los ataques incluyeron la quema de vehículos y propiedades de civiles palestinos, lo cual se produjo bajo la pasividad, según la ANP, de las autoridades militares israelíes.

La oficina del Ministerio de Exteriores palestino también criticó las declaraciones de varios funcionarios israelíes que sugirieron que el norte de Cisjordania debería ser tratado de manera similar al norte de la Franja de Gaza, donde las fuerzas israelíes han mantenido un asedio desde principios de octubre, que ha causado más de 3.000 muertes y desplazado a miles de palestinos.

Uno de los comentarios más polémicos fue el del ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, quien en redes sociales sugirió que áreas como Funduq, Nablus y Yenín deberían parecerse al campo de concentración de Yabalia, un asentamiento en Gaza. El ministro Smotrich, quien reside en el asentamiento ilegal de Kedumim, hizo estas declaraciones después del ataque palestino en el que dos atacantes abrieron fuego contra un autobús y varios coches cerca de la aldea palestina de Al Funduq, matando a tres israelíes.

El líder del asentamiento de Kedumim, Ozal Vatik, también se pronunció en la misma línea durante una entrevista con la radio del Ejército israelí. La ANP calificó tanto las declaraciones como los ataques de una escalada deliberada del conflicto, acusando a Israel de aumentar la violencia en la región.

La violencia en Cisjordania ocupada ha alcanzado niveles alarmantes, siendo este uno de los períodos más sangrientos desde la Segunda Intifada (2000-2005), con casi 500 palestinos muertos durante 2024, incluidos unos 75 menores. Por su parte, el número de israelíes muertos asciende a 40, la mayoría en ataques palestinos. En 2025, al menos cuatro palestinos han perdido la vida en enfrentamientos con las fuerzas israelíes.

La situación se ha intensificado tras los ataques de Hamás del 7 de octubre, lo que ha llevado a un aumento de las incursiones israelíes en Cisjordania. Desde entonces, más de 830 palestinos han sido asesinados, la mayoría por disparos de tropas israelíes, aunque algunos también han muerto a manos de colonos. Ante esta escalada, la ANP ha instado a la comunidad internacional a tomar medidas para garantizar una solución de dos Estados y evitar una mayor intensificación del conflicto.

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