Ottawa, 15 nov. – Aproximadamente 55.000 trabajadores de Correos de Canadá iniciaron una huelga tras no llegar a un acuerdo con su empleador en medio de un proceso de negociación que ya lleva casi un año. El Sindicato Canadiense de Trabajadores Postales (CUPW) anunció que, a pesar de los esfuerzos, han logrado pocos avances en sus demandas de mejores salarios, condiciones laborales más seguras y otros beneficios.
El sindicato emitió un aviso de huelga de 72 horas a principios de esta semana, reiterando que sus peticiones incluyen un trato justo en términos salariales y la mejora de las condiciones de trabajo. “Aún creemos que podemos lograr acuerdos colectivos negociados, pero Correos Canadá debe estar dispuesto a resolver nuestros problemas nuevos y pendientes”, indicó el sindicato en un comunicado.
Como respuesta, Canada Post notificó rápidamente un cierre patronal, aunque dejó claro que no tiene intención de cerrar las instalaciones a los trabajadores de manera permanente.
El servicio de correos y entrega de paquetes se ha visto interrumpido por la huelga. Según un comunicado de la corporación de la Corona emitido el viernes por la mañana, los clientes experimentarán retrasos significativos en sus envíos. “El correo y los paquetes no serán entregados durante la huelga y algunas oficinas de correos estarán cerradas”, informó Canada Post. Además, la corporación explicó que el cierre de instalaciones afectará su red nacional, y la reanudación del procesamiento y la entrega de correo podría tardar en normalizarse una vez finalizada la huelga.
En un intento por resolver el conflicto, el ministro federal de Trabajo, Steven MacKinnon, designó al director general de los Servicios Federales de Mediación y Conciliación como mediador especial para facilitar las negociaciones entre las partes. “Nuestros principales mediadores federales han estado trabajando incansablemente con las partes y ahora estamos enviando recursos adicionales a la mesa de negociaciones”, indicó MacKinnon en un mensaje en la red social X.
A pesar de la intervención del gobierno, los trabajadores de Correos de Canadá continúan presionando por cambios sustanciales en sus condiciones laborales, lo que podría afectar a los servicios postales a nivel nacional si no se llega a un acuerdo pronto.