Toronto, 12 Nov. – Durante la pandemia, Michael Ross Albert, dramaturgo canadiense, vivió en carne propia el angustiante estrés de intentar comprar una vivienda en Toronto, una ciudad donde la propiedad inmobiliaria se ha convertido en un sueño lejano para muchos. Con el precio promedio de una casa en el Área Metropolitana de Toronto proyectado a alcanzar los $1,19 millones a finales de 2024, según un informe de Royal LePage, Albert canalizó esta tensión en una nueva comedia titulada The Bidding War, que se estrena este martes en el Crow’s Theatre de Toronto.
La obra, que se centra en la crisis de la vivienda en la ciudad, retrata la frenética puja por una propiedad en una ciudad donde la competencia por cada metro cuadrado se ha vuelto despiadada. A través de una historia que se desarrolla durante un día de intensas negociaciones por la última vivienda asequible, la obra pone al descubierto los extremos a los que las personas están dispuestas a llegar para obtener una propiedad, mostrando las dinámicas humanas que se intensifican en un mercado inmobiliario saturado.
Dirigida por Paolo Santalucia y protagonizada por un elenco que incluye a Aurora Browne y Gregory Walters, The Bidding War se presenta como una sátira que explora la “injusticia” del sistema inmobiliario de Toronto. Albert, quien también escribió la obra, espera que el humor sirva como primer paso para abordar la crisis de la vivienda. “Necesitamos encontrar una manera de solucionar la crisis de la vivienda, y esperamos que reírnos de ello sea un muy buen primer paso”, afirma el dramaturgo.
La producción ha recibido elogios no solo por su crítica social, sino también por la energía que captura sobre la falta de alternativas para quienes intentan, a toda costa, acceder a la propiedad. La comedia no sólo refleja la locura del mercado inmobiliario, sino que también revela el lado oscuro de quienes operan dentro de este sistema, como se ve en los personajes interpretados por Browne y Walters.
“Toronto es sin duda un paraíso para quienes buscan su propio beneficio”, señala Browne, mientras que Peter Fernandes, quien interpreta a un agente inmobiliario, describe la obra como un espejo de la creciente desigualdad y la “explotación” que sufren los habitantes de la ciudad.
La dirección de Santalucia, marcada por una atmósfera de “violencia” y “humor corporal físico”, captura la urgencia y la ansiedad de un mercado que no da tregua, un sentimiento compartido por muchos que intentan desesperadamente encontrar un lugar donde vivir en una ciudad cada vez más inaccesible.
The Bidding War estará en cartelera en el Crow’s Theatre hasta el 15 de diciembre, ofreciendo no solo entretenimiento, sino también una reflexión crítica sobre la crisis de la vivienda que afecta a millones de personas.