L’Eliana (Valencia), 12 Nov. – El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha desmentido las informaciones que indicaban que había afirmado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que la situación derivada de la dana de finales de octubre estaba “bajo control”. Mazón, que respondió a las preguntas de los periodistas tras participar en una reunión del Centro de Coordinación Operativa Integral (Cecopi), aclaró que en su respuesta al mensaje de Sánchez, recibido alrededor de las 22:50 horas del 29 de octubre, no dijo que todo estuviera controlado.
“Le dije que aún había que coordinar al máximo la actuación”, precisó Mazón, subrayando que lo fundamental en esos momentos era continuar con la gestión de las emergencias.
En cuanto a la posibilidad de ceses en su Consell, Mazón evitó pronunciarse al respecto, reiterando que lo más importante en este momento es la coordinación para afrontar las secuelas de la dana y poner los recursos necesarios para la atención de las víctimas.
Durante su intervención, el presidente regional destacó que la prioridad actual es la limpieza de alcantarillas en las zonas más afectadas, un esfuerzo que continúa siendo complicado por la falta de camiones, aunque se están buscando “a toda velocidad”. Además, Mazón anunció que el Consell adoptará nuevas medidas fiscales para facilitar la recuperación y simplificar los trámites para los afectados, tras la firma de una orden para destinar 20 millones de euros a la reparación de caminos rurales, esenciales para garantizar el acceso a explotaciones agrícolas y ganaderas.
El presidente también mencionó la intensificación de los trabajos de limpieza, con el incremento en medio millar de los profesionales destinados a la retirada de lodo y residuos, lo que contribuye a mejorar la capacidad operativa tras las inundaciones.
La situación sigue siendo grave, con la búsqueda de posibles víctimas en diversos puntos, como la rambla del Poyo y el mar, mientras que continúan desplegados en el terreno más de 3.000 bomberos, 8.500 efectivos del Ejército y 800 voluntarios de Protección Civil, colaborando en las labores de rescate y recuperación.