Madrid, 14 oct.- El presidente del Senado, Pedro Rollán, ha anunciado este lunes que la ley sobre antecedentes penales que permitiría la conmutación de penas de prisión en otros países para varios miembros de ETA ha sido rechazada por mayoría absoluta en el pleno, lo que se interpreta como un veto al proyecto. Debido a este resultado, la propuesta será devuelta al Congreso de los Diputados para su revisión.
Aunque se esperaba que la ley fuera aprobada tras haber superado los trámites parlamentarios anteriores, la votación de este lunes, con 148 votos en contra, 111 a favor y dos abstenciones, ha generado un retraso inesperado en su aprobación. Rollán, basándose en un informe de los letrados de la Cámara, explicó que el rechazo por mayoría absoluta equivale a un veto, lo que obliga a devolver el texto al Congreso.
Un veto sin precedentes
El presidente del Senado sustentó su postura en un informe emitido por la Secretaría General del Senado el pasado viernes, que establece que un rechazo por mayoría absoluta en el pleno tiene el efecto jurídico de un veto. Aunque no se presentaron enmiendas ni vetos formales durante el proceso, el informe subraya que la Cámara expresó un “rechazo frontal y global” al proyecto de ley, lo que, según el artículo 90.2 de la Constitución y el artículo 106 del Reglamento del Senado, justifica su devolución.
Ahora, los servicios jurídicos del Congreso deberán estudiar la decisión del Senado para elaborar un informe que permita a la Mesa del Congreso tomar una decisión el próximo 22 de octubre sobre los pasos a seguir.
Tensión política en el debate parlamentario
La votación ha estado marcada por un fuerte debate en el Senado. La senadora del Partido Popular (PP), Marimar Blanco, hermana del concejal del PP asesinado por ETA, Miguel Ángel Blanco, tomó la palabra para expresar su rechazo al proyecto de ley. Durante su intervención, pidió la dimisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acusando al Ejecutivo de intentar “liberar a terroristas sanguinarios” mediante una “maniobra oculta”.
Blanco mencionó al exjefe de ETA, Francisco Javier García Gaztelu, alias Txapote, condenado por el asesinato de su hermano, y denunció que, a pesar de que esta reforma no afectaría directamente a Txapote, considera que el Gobierno está dispuesto a beneficiar a terroristas para mantenerse en el poder.
Por su parte, la senadora del PSOE, Elena Diego, calificó la actuación del PP de “espectáculo lamentable” y reclamó un debate parlamentario sin insultos ni provocaciones, exigiendo respeto a las reglas democráticas.