Washington, 29 sep. – Este sábado, Estados Unidos ha ordenado la salida de trabajadores no esenciales de su Embajada en Líbano, además de advertir sobre la posibilidad de imponer nuevas restricciones de viaje al personal estadounidense debido a preocupaciones de seguridad. Esta decisión se produce en el contexto de la ofensiva israelí y la reciente muerte del líder de Hizbulá, Hasán Nasrala.
El Departamento de Estado emitió un comunicado en el que describe la “situación de seguridad volátil e impredecible en Beirut”, indicando que la evacuación se aplica a los empleados no esenciales contratados directamente por Estados Unidos, así como a sus familiares.
La nota añade que “podrían imponerse restricciones de viaje adicionales al personal estadounidense bajo la responsabilidad de seguridad del Jefe de la Misión, con poca o ninguna antelación debido a mayores problemas de seguridad o amenazas”.
En este sentido, EE. UU. mantiene un aviso de “no viajar” a Líbano, instando a sus ciudadanos a abandonar el país de inmediato, en respuesta al creciente riesgo de crimen, terrorismo, disturbios, secuestros y el “riesgo de conflicto armado”, que ha aumentado notablemente en la última semana.