Tegucigalpa, 7 sep.- Más de mil hondureños se congregaron este viernes en una multitudinaria marcha con antorchas para exigir la renuncia de la presidenta Xiomara Castro, tras la difusión de un video que vincula a su Gobierno con el narcotráfico, así como para pedir la restitución del tratado de extradición con Estados Unidos. La movilización, organizada por el “Ejército Ciudadano de Paz”, se desarrolló pacíficamente hasta llegar a la sede del Gobierno en Tegucigalpa.
La polémica estalló luego de que la presidenta Castro decidiera cancelar el acuerdo de extradición con Washington la semana pasada. La oposición, liderada por movimientos políticos de derecha, acusa al partido oficialista, Libertad y Refundación (Libre), de querer implementar un modelo de gobierno similar al de Venezuela o Nicaragua. Además, sostienen que la cancelación del tratado de extradición busca proteger a miembros cercanos del Gobierno y a la familia de Castro.
Vínculos con el Narcotráfico y Renuncias en el Gobierno
Tres días después de la decisión, dos familiares cercanos a la mandataria presentaron su renuncia. Carlos Zelaya, cuñado de Castro y secretario del Congreso, dimitió tras admitir haberse reunido con narcotraficantes en 2013, según reveló un video filtrado por InSight Crime. Asimismo, su hijo, José Manuel Zelaya, quien se desempeñaba como ministro de Defensa, también renunció.
El video, divulgado por la organización estadounidense InSight Crime el 3 de septiembre, muestra a Devis Leonel Rivera Maradiaga, exlíder del cartel Los Cachiros, negociando sobornos con Carlos Zelaya. En la grabación, Zelaya menciona que parte del soborno sería para el expresidente Manuel Zelaya, esposo de Xiomara Castro, quien fue derrocado en 2009.
Protestas y Clamor Popular
Durante la manifestación, los participantes, vestidos con camisetas blancas, azules y de la selección de fútbol, corearon consignas como “Fuera el familión”, “Aquí no es Venezuela”, y “Si a la extradición”. Una pancarta con la imagen de la presidenta y el mensaje “Renuncia ya” destacó entre la multitud. Kilvet Bertrand, dirigente del Partido Nacional (PN), criticó la supuesta alianza entre el partido de Castro y el narcotráfico, que, según él, existe desde 2013.
Estas movilizaciones recuerdan las marchas de 2014, cuando hasta 100 mil personas salieron a las calles para protestar contra la corrupción en el gobierno del entonces presidente Juan Orlando Hernández, quien actualmente cumple una condena de 45 años en Estados Unidos tras ser extraditado en virtud del tratado ahora cancelado.
Denuncias de la Oposición
El diputado opositor Jorge Zelaya, también presente en la marcha, declaró que se unió a los manifestantes “en defensa de la democracia”. Mientras tanto, la presidenta Castro justifica su decisión de cancelar el tratado de extradición aludiendo a que este podría ser utilizado para planificar un “golpe de Estado” en su contra.
La situación en Honduras continúa siendo tensa, con un creciente descontento popular y un gobierno que enfrenta graves acusaciones relacionadas con el narcotráfico.