Santiago de Chile, 28 ago.- La campaña electoral para las elecciones municipales y regionales en Chile, que se celebrarán los días 26 y 27 de octubre, comenzó este miércoles y se extenderá durante dos meses. Este proceso electoral se desarrolla en un escenario marcado por la crisis de seguridad que atraviesa el país y un clima de profunda desafección política.
Las fuerzas de izquierda y centro-izquierda chilenas, junto con los democristianos (DC), han formado una alianza bajo el nombre “Contigo Chile Mejor”. Esta coalición, que por primera vez reúne en una sola lista a los partidos que integraron la antigua Concertación, junto con el Partido Comunista y la nueva izquierda del Frente Amplio, busca consolidar su posición en las elecciones.
Por su parte, las cuatro corrientes de derecha participan de manera separada. La alianza “Chile Vamos”, que incluye a Renovación Nacional (RN), la Unión Demócrata Independiente (UDI) y Evópoli, representa al ala tradicional de la derecha. La ultraderecha del Partido Republicano, los ultraconservadores del Partido Social Cristiano y la derecha populista del Partido de la Gente completan el espectro de la derecha.
Una novedad en estas elecciones es la aparición del bloque de centro “Centro Democrático”, que agrupa a los partidos Amarillos por Chile, Demócratas y Sentido Común, integrados por exmilitantes de la derecha tradicional y los democristianos.
Estas elecciones son las primeras municipales y regionales que se realizarán bajo el nuevo sistema de voto obligatorio, reintroducido en 2022 después de una década de participación voluntaria.
El principal foco de atención se centra en la Región Metropolitana, que alberga a 7 de los 19 millones de habitantes de Chile. En Santiago, una de las grandes incógnitas es si la comunista Irací Hassler, actual alcaldesa, podrá revalidar su triunfo. Asimismo, está en juego la reelección del gobernador de la Región Metropolitana, Francisco Orrego, quien compite como independiente con el apoyo del oficialismo.
Otro punto de interés es si las fuerzas de derecha lograrán mantener su único gobernador en la región de La Araucanía, un bastión tradicionalmente conservador.
Las encuestas recientes muestran una leve ventaja de la oposición con un 54% de las preferencias, mientras que el oficialismo cuenta con un 41%. Sin embargo, el desinterés y la desafección política que se ha incrementado desde el fin del proceso constituyente podría influir en la campaña hasta su cierre el próximo 24 de octubre.