CIUDAD DE GUATEMALA, 5 Feb.- El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, anunció el miércoles que su país aceptará migrantes deportados desde Estados Unidos, en el marco de un acuerdo de “tercer país seguro” negociado con Washington. La declaración se produjo tras una reunión con el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, quien se encuentra en su primer viaje oficial como principal diplomático de Estados Unidos, realizando una gira por varios países de Centroamérica.
De acuerdo con el presidente guatemalteco, los migrantes deportados serán inicialmente acogidos en Guatemala, pero luego serán devueltos a sus países de origen, con los costos de este proceso cubiertos por Estados Unidos. Este acuerdo es parte de los esfuerzos para abordar la crisis migratoria en la región, que ha sido una prioridad de la administración de Donald Trump.
En paralelo, Rubio anunció un acuerdo similar con El Salvador, que amplía el alcance al incluir también una oferta para aceptar a ciudadanos estadounidenses condenados por crímenes violentos, los cuales podrían ser enviados a El Salvador como parte de un acuerdo de cooperación más amplio en materia de seguridad y migración. La inmigración continúa siendo un tema central en las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y sus vecinos centroamericanos.