Washington, 30 ene. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este miércoles que firmará una orden ejecutiva para instruir al Pentágono a habilitar 30.000 camas en la base naval de Guantánamo (Cuba) con el fin de detener a inmigrantes indocumentados considerados peligrosos.
«Tendremos 30.000 camas en Guantánamo para detener a los peores inmigrantes ilegales criminales que son una amenaza para el pueblo estadounidense», afirmó Trump desde la Casa Blanca, en el marco de la firma de una ley contra migrantes con delitos menores.
El mandatario justificó la medida asegurando que algunos de estos inmigrantes «son tan peligrosos que ni siquiera confiamos en sus países de origen para que se los queden», por lo que serán enviados a la base naval. «Es un lugar duro. Es un lugar del que es difícil salir», añadió.
Guantánamo y su uso para detenciones migratorias
El Pentágono ya opera en la base de Guantánamo un centro de detención para inmigrantes, administrado de manera independiente a la prisión destinada a sospechosos de terrorismo. Sin embargo, la población migrante en la base ha sido históricamente baja. Según datos de The New York Times, entre 2020 y 2023 solo 37 personas fueron retenidas allí.
Los migrantes que llegan a esta instalación son, en su mayoría, interceptados en el mar por autoridades estadounidenses cuando intentan alcanzar las costas del país, principalmente desde Cuba y Haití.
El centro de detención en Guantánamo opera en un vacío jurídico, ya que las garantías legales en materia migratoria que rigen en territorio continental estadounidense no se aplican en la base naval.
Preocupaciones sobre las condiciones en Guantánamo
Diversos informes han señalado la falta de transparencia sobre la situación en estas instalaciones migratorias. Un reportaje publicado en septiembre de 2024 por The New York Times expuso condiciones precarias dentro del centro, incluyendo denuncias de que los detenidos son obligados a usar gafas de visión opaca durante los traslados, que sus llamadas con abogados son monitoreadas y que algunas áreas están infestadas de ratas.
La medida de Trump ha generado controversia y se espera que reciba críticas de organizaciones de derechos humanos y sectores políticos que cuestionan la legalidad y ética de expandir el uso de Guantánamo como centro de detención para inmigrantes.