Ciudad de México, 13 de noviembre de 2024 – La organización civil Data Cívica actualizó este miércoles su informe ‘Votar entre balas’, con datos de octubre que muestran una escalada de violencia política en México. Según el informe, 2024 se perfila como el año más violento en este ámbito, con 568 ataques de motivación política reportados, apenas dos incidentes menos que los registrados en todo 2023, lo que sugiere que este año podría superar esa cifra antes de finalizar.
El análisis de Data Cívica destaca que, tras las elecciones del 2 de junio, la violencia política no solo se ha mantenido, sino que ha aumentado. Entre los episodios más impactantes se encuentran la decapitación de Alejandro Arcos, alcalde de Chilpancingo, Guerrero, y el asesinato de Salvador Villalba, alcalde electo de Copala, también en Guerrero, ocurrido el 17 de junio. Estos crímenes se suman a la lista de seis alcaldes asesinados en 2024, tres de ellos tras las elecciones, subrayando un patrón de violencia poselectoral sin precedentes.
En total, durante el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), hasta 32 alcaldes fueron asesinados, siendo los estados de Guerrero, Oaxaca y Michoacán los más peligrosos para figuras políticas, según el informe. Este año, Guerrero lidera la lista de entidades con mayor número de ataques (70), seguido de Chiapas (63) y Puebla (54).
El informe de octubre detalla que se reportaron 41 incidentes de violencia político-criminal en ese mes, afectando principalmente a hombres (36 casos), aunque también se registraron agresiones hacia mujeres en el ámbito político. Entre los ataques registrados se incluyen asesinatos, intentos de homicidio, secuestros y amenazas dirigidas tanto a políticos como a sus familias.
Con dos meses aún por delante, las cifras de 2024 son un sombrío indicio de que la violencia política en México continúa sin freno, poniendo en peligro no solo a quienes aspiran a cargos públicos, sino también al proceso democrático mismo.