MADRID, 22 DE MAYO — Andréi Portnov, destacado exasesor del expresidente ucraniano Víktor Yanukóvich y figura clave en la política prorrusa de Ucrania, fue asesinado este miércoles en Pozuelo de Alarcón, un municipio residencial a las afueras de Madrid. El crimen ocurrió a las 9:15 horas, cuando Portnov, de 52 años, acababa de dejar a sus hijos en el Colegio Americano de la localidad.

Según fuentes oficiales próximas a la investigación, varios individuos abordaron a Portnov mientras intentaba subir a su vehículo, un Mercedes de alta gama color negro, y le dispararon en la cabeza y la espalda. Los atacantes huyeron hacia la cercana Casa de Campo, una extensa zona boscosa que conecta Madrid con Pozuelo de Alarcón, dejando al político sin vida en el lugar del atentado.


El Escenario del Crimen

El Servicio de Urgencias Médicas (SUMMA 112) confirmó la muerte de Portnov por “lesiones incompatibles con la vida” tras recibir múltiples disparos de arma de fuego. La policía científica analizó la escena durante toda la mañana, trabajando junto al coche en el que Portnov fue atacado. La zona fue acordonada, mientras drones y un helicóptero sobrevolaban los alrededores en busca de pistas sobre los autores del asesinato.

Diversos padres acudieron al colegio para recoger a sus hijos, aunque el centro aseguró que todos los alumnos estaban a salvo en el interior. A través de megafonía interna, se pidió a los estudiantes que permanecieran en las aulas. En un comunicado, el colegio informó que la víctima era padre de algunos de sus alumnos.


Portnov: Una Figura Controvertida

Andréi Portnov fue una figura central en el régimen de Víktor Yanukóvich, el expresidente ucraniano cuyo gobierno prorruso colapsó tras la Revolución del Maidán en 2014. Durante su mandato como jefe de la Administración Presidencial, Portnov jugó un papel decisivo en la respuesta represiva del gobierno a las protestas masivas que comenzaron en noviembre de 2013, tras la decisión de Yanukóvich de suspender un acuerdo de asociación con la Unión Europea.

Portnov fue investigado por apropiación indebida de fondos públicos y violaciones de derechos humanos durante las protestas, lo que llevó a la congelación temporal de sus activos por parte del Tribunal General de la Unión Europea. Su nombre también figuró en una lista negra de la UE debido a su implicación en estos hechos.

Además, el servicio secreto ucraniano investigó a Portnov por sus vínculos con Rusia, incluida su supuesta participación en acciones destinadas a desestabilizar a Ucrania tras la caída de Yanukóvich. Estas conexiones han alimentado especulaciones sobre posibles motivaciones políticas detrás del asesinato.


Hipótesis Abiertas

Por el momento, las autoridades no descartan ninguna línea de investigación. Entre las hipótesis se barajan:

  1. Motivos Políticos: Dada su controvertida trayectoria y sus vínculos con el régimen prorruso de Yanukóvich, el crimen podría estar relacionado con disputas políticas o ajustes de cuentas.
  2. Represalias Ucranianas: Algunas fuentes sugieren que grupos nacionalistas ucranianos podrían haber orquestado el asesinato como represalia por su papel en la represión del Maidán.
  3. Intereses Económicos: Portnov también ha estado vinculado históricamente a redes de corrupción y apropiación de fondos públicos, lo que podría haber generado enemistades dentro de círculos financieros.

Las investigaciones están siendo lideradas por agentes de Homicidios, Policía Científica y la Brigada de Información de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Sin embargo, hasta el mediodía de este miércoles no se había realizado ninguna detención.


Un Contexto Complicado

El asesinato de Andréi Portnov ocurre en un contexto internacional tenso, marcado por la guerra entre Rusia y Ucrania y la polarización política en Europa. Portnov representaba una era de influencia rusa en Ucrania que muchos en Occidente consideran corrupta y autoritaria. Su presencia en España podría haber sido vista como una provocación por quienes lo responsabilizan de las violaciones de derechos humanos durante el Maidán.


Conclusión

El crimen de Andréi Portnov plantea más preguntas que respuestas. ¿Fue un acto político? ¿Una venganza personal o financiera? Las autoridades españolas enfrentan la tarea de desenmarañar un caso que trasciende fronteras y tiene implicaciones geopolíticas significativas. Mientras tanto, la comunidad internacional observa con atención cómo evoluciona esta investigación que podría arrojar luz sobre las tensiones persistentes en la región del Este de Europa.

El asesinato también refuerza la necesidad de proteger a figuras políticas exiliadas, especialmente aquellas vinculadas a regímenes autoritarios o conflictos internacionales.

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