SAN SALVADOR, 21 ABRIL.- El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, propuso este domingo (20.04.2025) un “acuerdo humanitario” al mandatario venezolano, Nicolás Maduro, para repatriar a los 252 migrantes venezolanos detenidos en una cárcel de máxima seguridad en El Salvador, acusados de pertenecer a la banda criminal transnacional Tren de Aragua. A cambio, Bukele pidió la liberación y entrega de un número idéntico de “presos políticos” en Venezuela.
La Propuesta de Bukele
En un mensaje publicado en su cuenta de X (anteriormente Twitter), el presidente salvadoreño planteó:
“Quiero proponerle un acuerdo humanitario que contemple la repatriación del 100% de los 252 venezolanos que fueron deportados, a cambio de la liberación y entrega de un número idéntico (252) de los miles de presos políticos que usted mantiene.”
Bukele argumentó que esta medida permitiría resolver dos problemas simultáneamente: aliviar la situación de los migrantes venezolanos detenidos en El Salvador y abordar la crisis humanitaria en Venezuela, donde numerosos opositores al gobierno de Maduro permanecen encarcelados bajo la etiqueta de “presos políticos”.
El Caso de los Migrantes Venezolanos en El Salvador
Los 252 venezolanos detenidos en El Salvador fueron deportados desde Estados Unidos en los últimos meses, acusados de tener vínculos con el Tren de Aragua, una organización criminal catalogada como terrorista por Washington debido a su participación en actividades como tráfico de drogas, extorsión y lavado de dinero.
El gobierno salvadoreño, liderado por Bukele, ha mantenido una postura firme contra el crimen organizado, incluyendo la detención de extranjeros vinculados a estas redes. Los venezolanos están recluidos en una cárcel de máxima seguridad, diseñada específicamente para miembros de pandillas y grupos criminales.
Sin embargo, algunos sectores han cuestionado si todos los detenidos realmente pertenecen al Tren de Aragua o si fueron señalados injustamente durante los procesos de deportación desde EE.UU. Esto ha generado preocupación sobre la posibilidad de errores judiciales y violaciones a los derechos humanos.
La Respuesta Esperada de Maduro
Hasta el momento, el gobierno de Nicolás Maduro no ha emitido una respuesta formal a la propuesta de Bukele. Sin embargo, la oferta podría generar debate tanto dentro de Venezuela como en la comunidad internacional.
Maduro enfrenta constantes críticas por la detención de miles de opositores políticos, muchos de ellos encarcelados sin pruebas contundentes o bajo cargos considerados fabricados. Grupos de derechos humanos han documentado casos de torturas, desapariciones forzadas y malas condiciones en las cárceles venezolanas.
Si Maduro aceptara el acuerdo, sería visto como un gesto de apertura hacia la comunidad internacional y un esfuerzo por mejorar su imagen global. Sin embargo, también podría interpretarse como una admisión implícita de que mantiene a personas injustamente encarceladas.
Intereses y Contexto Político
La propuesta de Bukele parece buscar posicionarse como un mediador en asuntos regionales, consolidando su figura como un líder influyente en América Latina. Además, coincide con un período en el que El Salvador enfrenta críticas internacionales por sus propias políticas de seguridad, particularmente tras la implementación del régimen de excepción que ha resultado en miles de detenciones masivas.
Por otro lado, la relación entre El Salvador y Venezuela ha sido tensa históricamente, especialmente durante los años de polarización política en la región. Sin embargo, Bukele ha demostrado pragmatismo en su diplomacia, priorizando intereses nacionales sobre alineamientos ideológicos.
Posibles Implicaciones
- Humanitarias: Si se llega a un acuerdo, podría significar una mejora sustancial en las condiciones de vida de los migrantes venezolanos detenidos y los presos políticos en Venezuela.
- Políticas: La propuesta podría marcar un precedente en la resolución de conflictos regionales a través de intercambios humanitarios.
- Diplomáticas: Una eventual negociación entre Bukele y Maduro podría abrir canales de diálogo entre países que tradicionalmente han estado distanciados.
Conclusión
La propuesta de Nayib Bukele a Nicolás Maduro refleja un intento audaz de abordar dos crisis simultáneas: la situación de los migrantes venezolanos detenidos en El Salvador y la persecución de opositores políticos en Venezuela. Aunque aún falta ver si Maduro responderá positivamente, la iniciativa destaca la creciente influencia de Bukele en la región y su disposición a adoptar roles inusuales en la diplomacia internacional.
El éxito o fracaso de esta propuesta dependerá de la voluntad política de ambos gobiernos y de cómo manejen las complejidades legales y humanitarias involucradas. Por ahora, el mundo observa atentamente cómo evolucionará este posible acuerdo.