LOS ÁNGELES, 20 Dic.- El gobierno del presidente Joe Biden deportó a 271,484 inmigrantes durante el año fiscal 2024, que concluyó en septiembre, marcando la cifra más alta de la última década y superando cualquier año de las deportaciones realizadas por la Administración de Donald Trump (2017-2021).
Según un informe citado por el Washington Post, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) duplicó las deportaciones del periodo anterior, cuando envió a 142,580 personas de regreso a sus países de origen. Este récord también superó el máximo alcanzado por Trump en 2019, con 267,258 deportaciones.
Comparativa de deportaciones por administración
Año Fiscal | Deportaciones – Biden | Deportaciones – Trump | Deportaciones – Obama (último año) |
---|---|---|---|
2016 | N/A | N/A | 240,255 |
2017 | N/A | 226,119 | N/A |
2018 | N/A | 256,085 | N/A |
2019 | N/A | 267,258 | N/A |
2020 | N/A | 185,884 | N/A |
2021 | 59,011 | N/A | N/A |
2022 | 72,177 | N/A | N/A |
2024 | 271,484 | N/A | N/A |
Esfuerzos de deportación y recursos
Patrick J. Lechleitner, principal funcionario del ICE, aseguró que la agencia es “apolítica” y que sus agentes trabajan para cumplir las leyes establecidas por el Congreso. Sin embargo, alertó sobre la “falta crónica de fondos” como un obstáculo significativo para las futuras operaciones de deportación masiva prometidas por el presidente electo Donald Trump, quien asumirá el cargo el próximo 20 de enero.
Además de las deportaciones, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) reportó más de 700,000 remociones de extranjeros durante el año fiscal 2024, incluyendo las realizadas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). Esta cifra representa el mayor número de remociones en un año fiscal desde 2010.
Implicaciones políticas
El incremento de deportaciones bajo la administración de Biden podría influir en la agenda migratoria de Trump, quien ha prometido endurecer aún más las políticas migratorias. No obstante, la falta de recursos señalada por Lechleitner podría complicar la implementación de estas medidas.
Con la transición de poder a menos de un mes, la política migratoria sigue siendo un tema central en el debate político de Estados Unidos, con repercusiones significativas tanto para el país como para los migrantes afectados.