Beirut, 15 oct.- El grupo chií libanés Hizbulá informó este martes que sus combatientes se enfrentan con proyectiles y ametralladoras a una fuerza de infantería israelí que intentó infiltrarse en la localidad de Rab Thalathin, en el sur del Líbano. Según un comunicado del grupo, los combates comenzaron en la madrugada, alrededor de las 6:20 hora local (3:20 GMT), y aún continúan.
Hizbulá no ofreció detalles adicionales sobre el enfrentamiento, pero en varios comunicados posteriores reivindicó ataques con “andanadas” de proyectiles dirigidos contra soldados israelíes y posiciones del ejército al otro lado de la frontera. Entre los objetivos alcanzados por los proyectiles del grupo se encuentran áreas como Al Marg, Al Saddana y Berka al Naqar en las granjas de Shebá, una zona ocupada por Israel, además de Jelet Warda y Al Bagdadi.
Bombardeos israelíes en respuesta
Hasta el momento, Israel no ha emitido una respuesta oficial a los informes sobre los enfrentamientos, pero su artillería y aviación han continuado bombardeando varias localidades en el sur y este del Líbano. Las áreas afectadas incluyen Al Jiam, Marjayún, Kafr Roman, Al Qaseiba y Garguoa, en la región de Nabatieh, una de las más castigadas por los ataques.
Medios locales también reportaron que un dron israelí disparó un misil guiado a una motocicleta cerca de un estacionamiento en la ciudad de Kafr Sir, en Nabatieh, en horas de la mañana. No se han confirmado víctimas por este ataque.
Crisis humanitaria en Líbano
La escalada del conflicto entre Israel y Hizbulá, que se intensificó tras el inicio de las hostilidades en octubre de 2023, ha tenido un impacto devastador en la población civil del Líbano. Más de 2.300 personas han perdido la vida desde el comienzo de la crisis, con la mayoría de las víctimas reportadas en las últimas semanas.
Además, al menos 1,2 millones de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares, principalmente en el sur y este del país, así como en los suburbios del sur de Beirut, debido a la campaña constante de bombardeos israelíes. La situación humanitaria se deteriora rápidamente en las zonas más afectadas, mientras las tensiones siguen aumentando en la frontera entre Israel y Líbano.