São Paulo, 23 sep.- El diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del expresidente Jair Bolsonaro, enfrenta la posibilidad de perder su mandato luego de que el presidente de la Cámara de Diputados, Hugo Motta, rechazara este martes su nominación como líder de la minoría, propuesta por su partido, el Partido Liberal (PL), con el objetivo de evitar sanciones por ausencias en las sesiones plenarias.
La solicitud de Eduardo Bolsonaro se presentó hace una semana como estrategia para eludir la pérdida de su cargo, ya que los líderes partidarios no están obligados a registrar su presencia en el plenario. Sin embargo, la Secretaría General de la presidencia de la Cámara emitió un informe señalando que la nominación era incompatible, debido a que el legislador se encuentra fuera del país en una misión no autorizada y sin licencia parlamentaria vigente, ya que la que había solicitado venció en julio.
Según la decisión de Motta, la ausencia física de Eduardo Bolsonaro le impide cumplir adecuadamente con las responsabilidades del liderazgo de la minoría. De mantenerse fuera de Brasil, el diputado continuará acumulando faltas en las sesiones, lo que eventualmente podría derivar en la pérdida de su escaño.
El hijo del expresidente se trasladó a Estados Unidos en marzo con el objetivo de presionar al Gobierno estadounidense para aplicar sanciones contra Brasil en beneficio de su padre. Esta actividad llevó a la Fiscalía brasileña a presentar una denuncia penal ante la Corte Suprema, acusándolo de intento de coacción a la Justicia, en el marco de una investigación paralela al juicio por golpismo en el que Jair Bolsonaro fue condenado a 27 años de prisión por liderar un plan para dar un golpe de Estado contra el presidente actual, Luiz Inácio Lula da Silva, ganador de las elecciones de 2022.
Durante su gestión en Estados Unidos, Eduardo Bolsonaro logró que el Gobierno de Donald Trump impusiera un arancel adicional del 50 % a gran parte de las importaciones brasileñas, alegando que Brasil perseguía judicial y políticamente al expresidente. Además, el Gobierno estadounidense revocó los visados de entrada a varios jueces de la Corte Suprema y a altos funcionarios del Gobierno brasileño vinculados al proceso judicial contra Bolsonaro.
La situación política genera un escenario de tensión en la Cámara de Diputados de Brasil, donde se debate la pérdida de mandato de Eduardo Bolsonaro y las implicaciones de sus actividades internacionales en la estabilidad institucional y en la relación bilateral con Estados Unidos.