RÍO DE JANEIRO, 25 de julio – Miles de personas se congregaron este viernes en el emblemático Theatro Municipal de Río de Janeiro para despedir con lágrimas, música y homenajes a Preta Gil, cantante y actriz brasileña hija del icónico cantautor Gilberto Gil, fallecida el pasado domingo en Estados Unidos tras una larga lucha contra el cáncer de intestino.
El velatorio, de carácter público y cargado de simbolismo cultural, atrajo desde admiradores anónimos hasta destacadas figuras de la política y el arte. Entre ellos estuvieron la primera dama de Brasil, Rosângela «Janja» da Silva, en representación del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, y la ministra de Cultura, Margareth Menezes.
La alta afluencia de ciudadanos obligó a la Alcaldía de Río a cerrar calles aledañas al teatro y colocar vallas metálicas para organizar el ingreso del público que, en largas filas, esperaba su turno para rendir tributo ante el ataúd de la artista.
Como parte de los deseos expresos de la propia Preta Gil, el velatorio estuvo acompañado de una selección musical de sus temas favoritos de la Música Popular Brasileña (MPB), que sonó durante toda la ceremonia a través de altavoces dispuestos por los organizadores.
Entre los muchos arreglos florales y mensajes de cariño, destacó el enviado por la Presidencia de la República, que decía: «Nació para volar; cumplió su destino, tocó el cielo y solo distribuyó amor. Brasil agradece y celebra su luz».
Luego del acto, el cuerpo de Preta Gil fue trasladado por el Cuerpo de Bomberos al Crematorio del Cementerio de la Penitencia, recorriendo en su trayecto las calles del recientemente bautizado “Circuito de Carnaval de Calle Preta Gil”, una iniciativa oficial que rinde homenaje a su estrecha relación con el Carnaval carioca a través de su famosa comparsa «Bloco da Preta».
Preta Gil falleció a los 50 años, tras una ardua batalla contra el cáncer que le fue diagnosticado en enero de 2023. A pesar de haberse sometido a múltiples tratamientos de quimioterapia y radioterapia, la enfermedad se extendió a otros órganos a finales del mismo año, agravando su estado de salud.
Artista desde la cuna e hija de una leyenda de la música brasileña, Preta inició su carrera en 2003 con el álbum “Prêt-à-porter”, publicado cuando su padre ocupaba el cargo de Ministro de Cultura durante el primer mandato de Lula. Su legado se extiende más allá de los escenarios, siendo una figura clave de la diversidad, la alegría popular y la resistencia artística brasileña.