Washington, 5 de octubre.– El Tribunal Supremo de Estados Unidos dio este viernes un golpe judicial a miles de migrantes al fallar a favor de la Administración de Donald Trump, permitiéndole revocar el Estatus de Protección Temporal (TPS) que ampara a unos 600.000 inmigrantes, entre ellos más de 350.000 venezolanos, quienes ahora enfrentan un inminente riesgo de deportación masiva.
El fallo, aprobado por seis votos a favor y tres en contra, respalda la postura del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y revierte la decisión de un tribunal de distrito de California que había bloqueado la medida. La decisión permite al Ejecutivo reactivar el plan de Trump para eliminar el TPS concedido a varios países, incluyendo Venezuela, El Salvador, Nicaragua, Honduras y Sudán, aunque en esta etapa el impacto inmediato se concentrará en los venezolanos.
Según el dictamen, unos 350.000 venezolanos podrían ser detenidos o deportados de inmediato, mientras que otros 250.000 perderán toda protección a partir del 7 de noviembre, fecha de expiración del amparo. En contraste, los beneficiarios haitianos del TPS no se verán afectados por el momento.
“Aunque las posturas en el caso han cambiado, los argumentos legales de las partes y los daños relativos no lo han hecho. El mismo resultado que se acordó en mayo es el apropiado”, escribió la mayoría del Supremo, haciendo referencia a un fallo previo que ya había favorecido al Gobierno de Trump.
Críticas desde el ala progresista del Supremo
Las juezas Sonia Sotomayor, Elena Kagan y Ketanji Brown Jackson votaron en contra, calificando la decisión como “dañina e innecesaria”. Jackson, en su opinión disidente, advirtió que no podía “estar de acuerdo con esta interferencia repetitiva y gratuita en casos donde hay vidas humanas en juego”.
El Gobierno había solicitado al Supremo, a finales de septiembre, autorización para retirar las protecciones, argumentando que el TPS fue extendido de forma irregular por el presidente Joe Biden en 2021 y ampliado en 2023 sin fundamento legal suficiente.
El fallo se convierte en una victoria política clave para Trump, quien ha prometido en su nueva campaña electoral “restaurar el orden migratorio” y “revertir las políticas blandas” de Biden.
Reacciones y consecuencias
El abogado Ahilan Arulanantham, codirector del Centro de Derecho y Política de Inmigración (CILP) de la Universidad de California en Los Ángeles, calificó el fallo como “una señal extrema de que la Corte Suprema ha abandonado el derecho por la política”.
Mientras tanto, la Red Nacional de Jornaleros (NDLON), que representa legalmente a varios de los beneficiarios venezolanos, anunció movilizaciones para la próxima “Semana de Acción para Proteger a las Familias del TPS”, que se celebrará del 6 al 10 de octubre. “No permaneceremos en silencio ante tal injusticia”, declaró su abogada, Jéssica Bansal.
Oposición venezolana pide a EE.UU. reconsiderar su política migratoria
Desde Caracas, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) —principal coalición opositora venezolana— instó al Gobierno de Estados Unidos a revisar “en tiempo perentorio” su política migratoria y buscar “alternativas legales que permitan la permanencia” de los venezolanos afectados.
A través de un comunicado publicado en X (antes Twitter), la PUD recordó que la mayoría de los beneficiarios del TPS “se vieron forzados a emigrar debido a la crisis humanitaria, política y económica que azota a Venezuela”.
“Reiteramos la solicitud de que el Gobierno de los Estados Unidos revise, en tiempo perentorio, su política migratoria en favor de los venezolanos”, expresó el bloque opositor, que también pidió garantías para que los migrantes no sean criminalizados ni separados de sus familias.
El fallo del Supremo podría marcar un precedente jurídico en materia migratoria y tendrá repercusiones directas en las comunidades latinas en Florida, Texas, Nueva York y California, donde reside la mayoría de los beneficiarios del TPS.